El diario plural del Zulia

Editorial Versión Final | Periodismo y ética

Hoy es día de recordatorio más que de celebración en Venezuela. Día Nacional del Periodista, una fecha que recuerda a la gesta independentista, pero también al empuje de la verdad, de la razón, de la información.

No obstante, el escenario de hoy, en pleno siglo XXI, cuando las libertades de la prensa y la información han sido asentadas como marcos internacionales de primer nivel, en Venezuela el retroceso ha sido destructivo en la era del chavismo, en poco más de dos décadas se acabó un tejido comunicacional que se había levantado en todos los flancos, desde la histórica prensa escrita, la radio, la televisión e incluso el internet, un ataque que acabó con una cifra de más de 403 medios cerrados según la reconocida ONG Espacio Público.

Sí, la prensa en Venezuela se enfrenta nuevamente a la censura, las presiones, las manipulaciones. Los medios siguen siendo objetivo de gobiernos, de grupos criminales de poder, de políticos de oposición que dicen llevar las bandera de la democracia y las libertades.

Y ahí continúa, firme en su búsqueda de la verdad, del debate, de la formación ciudadana, con sus errores, con sus claroscuros, pero con una incesante fuerza por alumbrar desde la ética.

En Versión Final conocemos, al igual que muchos medios, ese combate, atacados por varios, no solo políticamente, sino también físicamente. Una trayectoria que ha llevado al medio a detener operaciones en papel y concentrar esfuerzos en el periodismo digital y redes sociales como altavoces de impacto de la era que vivimos, un camino que nos ha llevado por ataques criminales contra nuestra sede y nuestros periodistas y directivos.

Pero ahí continuamos, publicando y enfrentando con datos, investigación, contrastes, equilibrio, todo condensado en la llamada agenda propia con la que buscamos siempre rasgos diferenciadores, una agenda que responde a sentidos éticos, más nunca al negocio del sicariato mediático con el que comulgan agentes que se dicen periodistas y que solo buscan engrosar bolsillos con prácticas totalmente alejadas del periodismo real. Creemos y confiamos en el trabajo periodístico, no en la banalidad del dato sin confirmación ni en los enfoques a una sola voz.

El periodista ha tenido que sortear muchas barreras en la Venezuela de hoy, abrirse paso para llegar a medios golpeados, poner su nombre y pasar a ser prácticamente objetivo político, pero aún con esa carga de presión, confían en la prensa como artillería como la calificaba Hans Christian Andersen.

Nuestro llamado a las generaciones que se forman, a los periodistas que se restean desde la redacción y muchos más que han tenido que emigrar de nuestro país ante la amenaza constante de persecución o encarcelamiento es el mismo.

Sigamos adelante.

 

 

Carlos Alaimo

Presidente Editor

 

 

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