Aún mantienen detenido y acusado por "terrorismo" a un menor de edad con TDAH en Falcón

Jonathan Josué Bravo Palencia, un adolescente de 17 años con Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) y tics motores, ha sido detenido en Venezuela bajo la acusación de terrorismo, un hecho que ha generado preocupación por las graves violaciones a los derechos humanos y procesales que enfrenta. Según el Comité por la Libertad de los Presos Políticos (Clippve), su caso es un claro ejemplo de arbitrariedad judicial.
La detención de Jonathan ocurrió el 11 de enero de 2025, a las 3:00 p.m., cuando un grupo de hombres encapuchados y armados ingresó a su hogar en Coro, estado Falcón, sin una orden judicial. Durante este evento, Jonathan fue arrastrado fuera de su casa, mientras su madre fue agredida y su hermana de 9 años sufrió un impacto emocional significativo. Durante su traslado, una funcionaria de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) lo golpeó, lo que intensificó el abuso de autoridad.
Jonathan había completado su bachillerato y planeaba iniciar estudios en odontología en la Universidad de Ciencias de la Salud Hugo Chávez Frías.
Proveniente de una familia trabajadora y sin antecedentes penales, el joven participaba en un grupo de WhatsApp donde se discutían temas musicales y de actualidad nacional. No obstante, un comentario de un miembro del grupo llevó a su acusación de un supuesto plan para secuestrar al gobernador de Falcón, una acusación que carece de pruebas.
La aprehensión de Jonathan se produce en un clima de tensión política, coincidiendo con la toma de posesión presidencial. A pesar de que una jueza había ordenado su permanencia en Coro, fue trasladado sin aviso a Caracas, lo que provocó la angustia de su familia, quienes solo se enteraron de su ubicación tras buscarlo durante días. Finalmente, se encontró en la PNB La Yaguara, donde estuvo más de 30 días en condiciones inadecuadas para un menor.
En este centro, Jonathan sufrió complicaciones de salud, incluyendo edematización, vómitos y fiebre, sin recibir atención médica adecuada. Su audiencia preliminar se llevó a cabo el 11 de febrero y posteriormente fue trasladado nuevamente, en condiciones que vulneran sus derechos, enfrentando acusaciones de terrorismo e incitación al odio. Posteriormente, volvió a Coro el 20 de febrero y se encuentra actualmente en la Entidad de Atención para varones.
Al regresar, su familia fue informada de que no podría verlo por 15 días, dejándolo en completo aislamiento y sin acceso a una defensa justa. La madre de Jonathan, Francis Palencia, está a la espera del juicio sin información sobre quién será el juez, mientras el defensor público no responde sus llamados.
Su familia exige su liberación inmediata, respeto a sus derechos y una investigación de los abusos sufridos, así como sanciones para quienes ordenaron su detención irregular y el uso de la fuerza excesiva.