Marlon S. Jiménez García | Constitucionalidad y Unidad Trascendental

En la vida de toda democracia un problema permanente es la armonización recíproca entre la democracia y la Constitución. Cuando se privilegia al autogobierno, a la democracia colectiva o a la denominada democracia directa o participativa, en el fondo no se establecen límites al poder popular soberano,

La democracia representativa, en cambio, fundamentada en el Estado de Derecho, sí pone límites a ese poder para preservar la convivencia democrática y los derechos de la minoría. Para el "usurpador" y su gobierno, sólo existe la democracia directa ideologizada, no la representativa, a pesar de lo que establece la Constitución Nacional de 1999.

Para ellos, además la Constitución es solo un instrumento para limitar el poder evitando toda hegemonía. Con estas concepciones, aun antes de entrar en discusión y aprobarse   la constitución nacional, se implantó una matriz de poder hegemónica que permitió al “inquilino del averno” concentrarlo todo para los afectos del Estado. Este, entonces es, genéticamente autoritario, para abonarle así el terreno al posterior malévolo socialismo del siglo XXI.

El espíritu y filosofía de acción de la Constitución que se discutía, se violó antes de aprobarla. A partir de allí, las "violaciones a la democracia" y a la Constitución son el pan de cada día.

Recordamos, en plena efervescencia del poder; cuando al precitado personaje la Constitución le estorbaba. Cuando ganó las elecciones del 2006 (de manera fraudulenta, como lo dice el General Hugo Carvajal, hoy detenido en Estados Unidos) ya la Constitución Nacional le era incómoda; intentó cambiarla por completo. En una de sus peroratas para la fecha, le espetó públicamente y de manera templaría a Miquilena: “haber hecho una Constitución para la oposición”

Desde el 2008  a través de Leyes inconstitucionales, el gobierno ha ido conformando una Constitución apócrifa, que nada tiene que ver con la de 1999. En estudio de una organización se revela que, para la época señalada, 107/350 artículos de la Constitución han sido "violentados", incluso más allá de lo propuesto en la fracasada reforma de 2007. La propia elección del gobierno, es una muestra que la hegemonía de poder empleada por su antecesor, era completamente fuera del Estado de Derecho establecido. Hoy, la "violación" de la Constitución Nacional es casi absoluta, se violan 344/350 artículos.

Venimos insistiendo que la Unidad Trascendental debe ser indoblegable presionando de todas las maneras posible, de acuerdo, a la Constitución Nacional, para obligar, quiera o no, al régimen a respetarla. Se burla descaradamente de la soberanía nacional y no pasa nada.

En la actualidad, en 2025, No Hay Constitución Nacional, sólo existe para en la sustentación del Estado las reglas impuestas por la Constitución Nacional de Cuba.. És decir, los cubanos deciden, a capricho y a discrecionalidad, los intereses del gobernador para mantenerse en el poder: el nombramiento del TSJ, del CNE, del Fiscal, del defensor del pueblo, del manejo de los recursos públicos, de la participación de la FAN en la seguridad nacional, del manejo administrativo de los trabajadores del Estado, la abolición sindical y de los derechos inherentes a esa funciones y pare Ud de contar. Es decir, que la Constitución Nacional de 1999, está en el proceso de muerte latente, pero que ha sido acelerada por el miedo que le tienen al liderazgo nacional electo el 28 de julio del año pasado.

Pero el tiempo transcurrido para éste, se ha convertido en su otro enemigo potencial, la inacción es mortal y el desinterés de la comunidad internacional (no podemos pensar que otro país va a enviar a sus soldados a entregar sus vidas para defendernos a nosotros) se convierte en un soslayo inobjetable para lograr el cambio necesario..

Nuestra estrategia de lucha, debe ser dirigida por nuestros líderes y consecuencialmente, es obligante la participación activa de todos los venezolanos y de todos los que aún se proclaman chavistas. Los cubanos hay que sacarlos de todo lo que signifique Poder; lo he venido diciendo con propiedad y en otros artículos que he escrito, he señalado puntualmente los artículos que, de la Constitución Cubana se aplican en Venezuela de manera Taxativa, sin quitarles puntos y comas. Eso es de una gravedad absoluta, eso requiere el mayor esfuerzo de toda la sociedad civil y de la responsabilidad que tiene con nuestro país, en el rescate de la institucionalidad y de la legalidad perdida.

El Presidente de la nación más poderosa del planeta no tienen ningún interés por los venezolanos, la demostración de ello, es la persecución implacable e inmerecida contra nuestros millones de venezolanos que se encuentra como migrantes en su país; ellos no son turistas, están allá huyendo de la barbarie y la ignominia presente en su país, Solo le interesa es la satisfacción de sus coterráneos sobre nuestras riquezas, sin importar el carácter de gobierno del país que las tenga. Unidad Trascendental, no numérica nos daría la fortaleza para derrotar a los cubanos. “Quien no se preocupe por la cosa pública no puede llamarse pasivo, sino inútil” Pericles, político ateniense.