El nacionalista Nawrocki electo como Presidente de Polonia

Karol Nawrocki, historiador nacionalista, ha ganado la segunda vuelta de las elecciones en Polonia con el 50,89% de los votos, según los resultados definitivos publicados por la Comisión Nacional Electoral (PKE) el 2 de junio de 2025. Su oponente, el liberal Rafal Trzaskowski, obtuvo el 49,11% de los sufragios.
La ajustada diferencia de solo 1,78% pone de manifiesto la polarización política en el país, que es miembro de la Unión Europea y la OTAN.
La participación en este balotaje alcanzó un notable 71,63%, la cifra más alta registrada en este tipo de elecciones en Polonia. Este resultado representa un golpe significativo para la coalición liderada por Donald Tusk, que ya había sido advertida tras la primera vuelta de que había recibido una "tarjeta amarilla" de parte de la ciudadanía, aunque Tusk confiaba en una victoria.
La elección de Nawrocki, quien es visto como un continuador de la agenda del actual presidente Andrzej Duda, desplazará el enfoque político en el país. Duda, quien concluye su segundo mandato en agosto, ha vetado anteriormente varias iniciativas de la oposición, lo que sugiere que la gestión del gobierno de Tusk seguirá siendo desafiante. Durante su discurso de agradecimiento, Duda alabó la participación de los votantes y felicitó a Nawrocki, expresando "¡mantente fuerte, Polonia!".
Si Trzaskowski hubiese triunfado, habría tenido la oportunidad de impulsar reformas significativas, como la liberalización del aborto, el reconocimiento de uniones civiles y la reversión de las reformas judiciales implementadas por el partido de gobierno, PiS (Ley y Justicia). Su derrota complica las posibilidades de avance en su agenda reformista.
El panorama político polaco, tras los resultados de estas elecciones, genera incertidumbre, sobre todo en relación con la capacidad del gobierno de Tusk para avanzar en su programa, que es percibido como una respuesta a la creciente conservaduría del país. La diferencia menor al 2% en ambos balotajes (0,28% en esta elección y 2,06% en 2020) indica una sociedad dividida y con un electorado que mantiene posturas encontradas sobre el futuro político de Polonia.
En resumen, el ascenso de Nawrocki, respaldado por una población que ha expresado su descontento en las urnas, sugiere un período de continuidad en las políticas de Duda y un futuro incierto para las propuestas progresistas de la oposición.