Raúl de Molina cuenta su crisis médica tras cirugía estética que casi acaba su vida
El presentador de El Gordo y la Flaca vivió momentos críticos tras una cirugía que lo llevó al hospital de urgencia. En entrevista exclusiva con People en Español, detalló el episodio que lo puso al borde del colapso. Además, explicó cómo su hija Mía le salvó la vida
Lo que comenzó como una cirugía estética para mejorar su calidad de vida, terminó convirtiéndose en una pesadilla para Raúl de Molina. El querido conductor de "El Gordo y la Flaca" se sometió hace un mes a una panniculectomía, un procedimiento para remover el exceso de piel y grasa del abdomen. Aunque la intervención fue exitosa le retiraron más de 15 libras de tejido, días después sufrió una grave complicación.
Mi hija Mía se iba a su clase de pilates, y yo me iba a sentar en una silla que me compré. Lo último que recuerdo es que desperté y vi a Mía llamando al 911”, relató De Molina en conversación con People en Español. “Había perdido sangre por todos lados y me tuvieron que hacer una transfusión”.
Los médicos tuvieron que operarlo de emergencia para evitar una sepsis, una infección grave en el torrente sanguíneo.
Mía quedó un poco traumatizada”, confesó el presentador, quien pasó tres días hospitalizado. “Hoy ya estoy en recuperación”.
El calvario de Raúl comenzó a finales de mayo, luego de años de lucha contra el sobrepeso, en los que logró perder más de 110 libras. Aunque inicialmente la cirugía representaba un cierre simbólico y físico a ese proceso, una caminata aparentemente inofensiva diez días después del procedimiento desató el caos.
“Empecé a caminar unas 2.1 millas en total durante el día, dentro de mi edificio. Al octavo día, me empezó a doler el pie izquierdo”, recordó. Tras consultar con un médico que no era su cirujano plástico, comenzó a tomar antiinflamatorios que complicaron aún más su estado de salud.
Quizá no me debía haber hecho la cirugía, pero era necesaria. Hay que asesorarse bien con los médicos”, reflexiona ahora. “No hay que estar bobeando como yo”.
Gracias al apoyo de su esposa Millie, su hija Mía y sus médicos entre ellos el Dr. Juan Rivera, Raúl espera estar de vuelta al trabajo en los próximos días. “Hace veinte días que no puedo salir, pero espero que el lunes ya esté de regreso”, dijo optimista. “Una vez que esté sano, volveré a mi rutina y al ejercicio”.