¡Memorable concierto! Ilan Chester deleitó con sus cuentos y canciones en el "Bellas Artes"

Una mágica y memorable velada musical disfrutó el público zuliano durante el concierto "Canciones y Cuentos" que el cantautor venezolano Ilan Chester ofreció, a casa llena, la noche de este sábado 23 de septiembre, en el Centro Ateneo Bellas Artes de Maracaibo.

La cita con el músico de Venezuela estuvo colmada de amena plática, buena música, risas e interacción espontánea con el público, que esperó con ansias este reencuentro.

El grupo marabino Caraibe inició el show a las 7:30 p.m., con un espectáculo lleno de energía y talento, donde el romanticismo de sus temas promocionales "Si te vuelvo a ver", "Dejarte ir" y "Secretos", deleitaron a los presentes. También desataron la euforia con "Cuando me enamoro", de Enrique Iglesias; y "Ahora te puedes marchar", de Luis Miguel.

Tras ser despedidos con una ovación y el cariño del público, los cuatro jóvenes músicos e intérpretes: Jesús, Omar, Osaín y “Many”, pasada las 8:00 p.m., le dieron la bienvenida a Ilan Chester, quien hizo su entrada triunfal a las tablas del "Bellas Artes" con una gran sonrisa, su cabello blanco y característicos lentes.

Con un blazer negro perlado, franela, pantalón y gomas de igual color, el maestro saludó a los presentes y con micrófono en mano comenzó a repasar sus momentos más importantes de su carrera, en especial los vividos en Maracaibo.

Recordó que en su infancia era un chico tremendo, "pero no malo", que más de una vez visitó la dirección de su escuela por un extraño sonido que hacía con su boca y molestaba a un maestro. También que debió cambiarse su apellido, porque resultaba innombrable a sus profesores: Czenstochowski Schaechter.

Con sus éxitos "Dímelo", "Marea de la mar" y "Recíbeme", del disco de la Amistad, Ilan inició su presentación, sentado frente a su compacto piano rojo. El éxtasis y la emoción se apoderaron de sus fans. Los aplausos nuca cesaron.

Retomó el micrófono, y de pie relató su historia de amor en Maracaibo, cuando de joven viajaba todos los fines de semana desde Caracas y en Expresos Alianza para visitar a su novia de la época. También contó que vendía inciensos en el centro de la ciudad, por "el Lía Bermúdez", donde incluso cruzó palabras con otro buhonero que lo apodaba "Cebollita", en alusión a su corte.

El viaje musical continuó con los temas "Ojos verdes", "Soledad", "Por alguien como tú", "Una en un millón", "Palabras del alma", "Un querer como el tuyo" y "Daniela", que fueron coreados a todo pulmón acompañados de una ovación.

Cuando ya transcurría más de una hora de una buena música, Ilan Chester prosiguió su presentación con los temas “Es verdad”, “Amor de entrega total” y “Anhelante”, que interpretó con un solo de guitarra ejecutado por el compositor, cantante y productor zuliano Pablo Rodríguez. El joven guitarrista también entonó “Aquel Zuliano”, tras la insistencia de Ilan, quien aseguró que no estaba planeado.

El cantautor venezolano terminó de pasear a su público por sus 40 años de vida artística con otros clásicos de su repertorio como “Dime si lo notas”, “El Destino”, “Para siempre”, y por supuesto el contagioso y rítmico “Cerro El Ávila”, con el que se despidió del escenario dejando eufórico al público presente.

Sin embargo, ante el maravilloso y extraordinario espectáculo, el soberano aplaudió y gritó sin cesar pidiéndole a Ilan que regresara a las tablas, a lo que accedió complaciendo con los clásicos “Como llora una estrella”, “Historia de un buen día” y “Falleció el senador”.

Así de sencillo, humano y carismático. Amo y señor del piano, con unas manos prodigiosas y un talento vocal insuperable, el maestro Ilan Chester le regaló a Maracaibo 22 de sus más reconocidas canciones, en dos horas de un show en íntimo, que dejó boquiabiertos a propios y extraños.