Arnold Schwarzenegger exige a Supremo de EE.UU. que acabe con manipulación electoral

El actor Arnold Schwarzenegger participó este martes en una manifestación frente al Tribunal Supremo de Estados Unidos para exigirle que acabe con "la manipulación" de los mapas electorales con fines partidistas.
"El único que puede resolver este problema es el Tribunal Supremo, los que han creado el problema no pueden solucionarlo, ellos lo han creado y quiere mantenerse en el poder", denunció Schwarzenegger, aclamado por más de un centenar de personas a los pies del Tribunal Supremo, en Washington.
Los nueve jueces del alto tribunal celebraron una audiencia para estudiar si trazar mapas electorales con el objetivo de beneficiar al Partido Republicano o al Demócrata va contra la Constitución, un asunto que podría afectar los resultados de futuras elecciones legislativas.
El exgobernador republicano se colocó en una plataforma desde la que podía ver el Congreso de EE.UU. y se dirigió directamente a los congresistas que se benefician del llamado "gerrymandering", una técnica que permite a los estados trazar los distritos electorales de manera que favorezcan la victoria de un legislador de un partido determinado.
"Durante décadas, han dicho que van a arreglar el sistema migratorio, durante décadas han dicho que van a reparar las infraestructuras, durante décadas han dicho que van a encontrar una solución para el sistema de salud, durante décadas han dicho que van a disminuir la deuda", cargó Schwarzenegger.
"Han hablado -continuó- de todos esos problemas y no han conseguido nada y, al mismo tiempo, el 98 % consigue ser reelegido. Ustedes saben que el sistema está amañado, saben que es un sistema en el que los políticos eligen a los votantes, en vez de que los votantes elijan a los políticos".
Y, así, aclamado por decenas de personas, Schwarzenegger adaptó a las circunstancias su célebre "Hasta la vista, Baby" y clamó: "Es hora de decir, hasta la vista 'gerrymandering', es hora de terminar con el 'gerrymandering'".
La concentración en la que participó el exgobernador de California comenzó a las 10.00 horas (14.00 GMT) y se prolongó durante más de dos horas.