Su expareja la agrede y deja malherida en Caracas
Un sujeto dio la cola bajo engaño a una estudiante de Comunicación Social, que se disponía a ir a una farmacia, pero terminó llevándola a la vía El Junquito, donde ella intentó pedir ayuda a unos policías, pero el hombre la arrastró por la carretera y después la hirió en el cuello con un pedazo de vidrio
Una estudiante de Comunicación Social de 20 años sufrió un infierno el pasado lunes 14 de diciembre a tempranas horas de la madrugada, en Caracas. Ella necesitaba ir con urgencia hasta una farmacia. En ese momento, su expareja le ofreció la cola, pero la joven no sabía lo que le esperaba.
Íngrid Gomes Andrade, estudiante en la Universidad Santa María, fue abordada por su expareja, José Luis Da Silva, en condición de amigo, quien ofreció llevarla a la farmacia.
Reseña El Nacional que el sujeto la embarcó en su carro e Íngrid se quedó dormida. Cuando despertó, no sentía las manos y los pies. Ella le preguntó a Da Silva qué le hizo. "Si no estás conmigo, nos matamos los dos", fue la aterradora respuesta.
En ese instante, la universitaria recibió una llamada de su madre, preocupada porque no llegaba a la casa. El individuo le advirtió que si ella respondía la llamada, tiraría el carro por el barranco.
Ambos transitaban por el kilómetro 12 de la vía El Junquito, localidad donde vive Da Silva. La dama creyó que podría salvarse cuando vio un módulo policial, y para pedir ayuda se iba a arrojar del auto en marcha, pero el hombre la agarró por el cabello y aceleró la unidad para arrastrarla varios metros por la carretera, causándole varios raspones y hematomas, ahondó El Nacional.
El joven frenó violentamente el vehículo, bajó, agarró una botella rota e hirió a Gomes en el cuello.
Los oficiales que presenciaron el suceso fueron en auxilio de Íngrid, y con puntapiés trataron de neutralizar a José Luis, quien cortó a uno de los uniformados, pero otro de los agentes le propinó un cachazo para dejarlo inconsciente.
A la estudiante la trasladaron hasta un hospital, donde permanece recluida con los golpes sufridos y raspones, además de una herida cortante de 20 puntos de sutura en el cuello, a la espera de ayuda económica para los gastos médicos. Sus compañeros de clases afirman que ella se encuentra en estado crítico, y exigieron "todo el peso de la ley" para Da Silva.
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