El secuestro en el Zulia deja de ser rentable

Tomás salía de la panadería. Era de noche, cuando iba a abordar su camioneta Toyota Fortuner. Pero al sentir en su cuello el cañón de un arma de fuego, sus planes se cayeron. Lo montaron en la parte posterior, mientras un Mitsubishi los escoltaba. A toda velocidad salieron del norte de Maracaibo. Unas horas después, a la víctima la abandonaron en un sector del municipio Mara, sin su vehículo.
Así sucedió entre el sábado 9 y el domingo 10 de julio del año pasado, en la capital zuliana. En diferentes puntos de la ciudad, dos damas y un hombre fueron sometidos por ladrones de autos, ruleteados por esas zonas, hasta abandonarlos: a una, en Carrasquero; a la otra, en 18 de Octubre; y al caballero, en Los Dulces. Escenas como estas se repiten prácticamente a diario.
De este tipo de delito no hay estadísticas oficiales. Sobre los secuestros, modalidad que ha perdido atractivo para los hampones, en el Zulia, hay un registro, extraoficial, de cuatro plagiados, este año.
La primera víctima fue Esteban Morán Chourio, joven ganadero de 28 años, a quien se llevaron de una hacienda en el sector Sajarita, municipio Rosario de Perijá, el pasado 15 de enero. Tras 11 horas de pesquisas, al secuestrado lo rescataron en un cambuche, en el sector El Basurero, en la misma zona.
El 6 de abril, un grupo comando secuestró al productor agrario Fernando Javier Barboza Fuenmayor, de 37 años, de su hacienda 5 de Julio, cercana al puente del río Zulia, en el kilómetro 33 de la carretera Machiques-Colón, en el municipio Jesús María Semprún. El 24 de agosto, lo liberaron en Cúcuta, Colombia.
El 18 de julio, Edioveth Hernán Gutiérrez Romero, de 48 años, fue la tercera víctima. Se lo llevaron de su finca Villa Alta, en el municipio Rosario de Perijá. A los cuatro días, el Grupo Antiextorsión y Secuestro (GAES) lo rescató en el sector El Diluvio, del municipio Jesús Enrique Lossada.
Y Dumar Alejandro Paz, de 15 años, fue plagiado el pasado 28 de septiembre, de la nca San Isidro, en Gibraltar, municipio Sucre, y horas después fue rescatado por el GAES.
Delito poco rentable
El director del Observatorio de Delito Organizado y de la Asociación Civil Paz Activa, Luis Cedeño, considera que el delito del secuestro en general no está disminuyendo, sino que va mutando hacia formas económicamente más rentables.
A su juicio, el secuestro ha disminuido un poco, a favor de otras modalidades como el secuestro exprés, secuestros virtuales y modalidades de extorsión “que son mucho más rápidas y rentables”.
El analista en seguridad y violencia urbana y columnista de El Nacional, Marcos Tarre Briceño, al referirse al hecho de que en el Zulia han descendido los secuestros, asevera que estos hechos entrañan toda una logística bastante complicada para los delincuentes.
Por eso, los hampones, apunta el especialista, adoptan una modalidad evolucionada del secuestro exprés, “en que algunas bandas delictivas han ampliado su logística porque entienden que en un secuestro exprés que se resuelve en pocas horas, en que retienen por lo general a la víctima dentro de su vehículo y de allí con el teléfono celular de la víctima empiezan a hacer llamadas, dan vueltas por la ciudad, los mismos delincuentes entienden que es poco el dinero que la familia pueda conseguir en esas pocas horas”. Afirma Tarre que los delitos tienden a desplazarse de regiones.
“Si bien, a lo mejor en Maracaibo o en el Zulia, puedan haber bajado, es posible que en otros estados, en el oriente del país, o en la misma Caracas o en Miranda pueden haberse incrementado, porque los delincuentes buscan las zonas donde se considera que pueden actuar con mayor impunidad y sin menor riesgo para ellos”, dijo.
Y se re rió a la división de las tareas de estas bandas dedicadas al delito. “Una banda puede ser la que captura a las víctimas en la calle y otra es la que se encarga de retenerlo por dos o tres días y de negociar con las víctimas. Entonces este primer grupo recibe un pago solo por llevar a las víctimas a esos sitios y la otra se ocupa de retener en un lugar específico a la víctima y de gestionar el pago del rescate”, detalló.
El analista opina además que desde el año 2004 no existen cifras oficiales relacionadas con el delito de secuestro, por ello “es imposible hacer seguimientos y comparaciones de cuál es la realidad en materia de secuestro y de los otros tipos de delitos”, acota.
Condena
El abogado criminólogo Luis Izquiel refirió que por el delito de secuestro, la Ley contra el Secuestro y la Extorsión establece una pena entre 20 y 30 años de prisión, según el artículo 3. Sin embargo, cuestiona que este mismo delito también está tipificado en el Código Penal.
El artículo 462 establece presidio de 10 a 20 años para quien haya secuestrado a una persona para obtener de ella dinero o algún otro beneficio.