Cicpc: “El Conas” y “El Adriancito” serían los responsables de los atentados con granadas
Seis cooperadores de estos delincuentes (cuatro hombres, una mujer y un adolescente) fueron detenidos por la policía científica. Las capturas se ejecutaron en Cabimas, tras un intenso proceso de investigación de campo y análisis telefónicos, a cargo de la División Contra Extorsión, base Zulia.
Tras los recientes ataques con granadas a centros comerciales y negocios de Maracaibo y Cabimas, el máximo jefe del Cicpc en Venezuela, comisario Douglas Rico, informó sobre la detención de seis personas vinculadas a estos hechos, miembros de las bandas de “El Conas” y “El Adriancito”.
Las capturas se ejecutaron en Cabimas, tras un intenso proceso de investigación de campo y análisis telefónicos, a cargo de la División Contra Extorsión, base Zulia.
El primer arresto ocurrió en el sector La Rosa, cuando un menor de 17 años portaba un artefacto explosivo con el que pretendía atentar un comercio de la zona y al notar presencia policial emprendió huida.
Durante la detención del adolescente, quien según el comisario Rico “cooperaba con el grupo hamponil de ‘El Adriancito”, se le ubicó un celular donde se evidencia su constante comunicación con “El Pinky”, aún por detener, y también miembro activo de la banda.
Por otra parte, en el sector El Lucero de Cabimas, el jefe del Cicpc informó que “se logró la ubicación y captura de cuatro hombres y una mujer, que cooperaban con el grupo hamponil liderado por Oscar Enrique Guzmán Chirinos (31), apodado El Conas, quien mantiene en zozobra a comerciantes y residentes del estado Zulia”.
Los aprehendidos quedaron identificados como Lucía Acosta De Guzmán (31), Rubén Guzmán (45), Cesar Guzmán (51), Orlando Guzmán (41) y Edwin Navarro (29).
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Dichas personas “se encargaban de la logística necesaria para ejecutar los atentados violentos a los comercios y viviendas de quienes se negaban a cancelar las sumas de dinero exigidas por alias El Conas, a cambio de permitirles trabajar”.
El director nacional del Cicpc acotó que ellos “se encargaban de ubicar información de las víctimas y suministrárselas a dicho delincuente para que inicie los llamados extorsivos. Se le ubicaron cuatro celulares, que, al ser sometidos a experticias telefónicas, se les comprobó comunicación constante y ejecución de órdenes delictivas”.
Ambos casos fueron puestos a las órdenes de las fiscalías 48º y 38º, respectivamente, del Ministerio Público.