Asesinan a chofer de por puesto en Barrio Obrero presuntamente para robarlo

Euclides de Jesús Villalobos Finol, de 58 años, salió de su casa luego de un mes de reposo a trabajar como chofer de tráfico de la línea Carmelo Urdaneta, en su Malibú marrón, placa 01AB9FB. A las 5:30 de la mañana del miércoles, cuando se disponía a hacer su primer viaje de pasajeros, dos delincuentes lo sometieron, a la altura de la parada de Ruta 6, en barrio Obrero, parroquia Venancio Pulgar. Forcejearon y en un altercado le dispararon a quemarropa en la frente.

Los desconocidos se subieron al vehículo y adentro lo apuntaron, aparentemente para despojarlo de su carro. Uno iba adelante y otro atrás. Pero en la pelea, Euclides, quien hace un mes sufrió un ACV, perdió el control del volante y chocó. Los maleantes le dispararon en la frente a quemarropa y huyeron, según informaron los detectives del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc).

La bala entró y salió. Las gotas de sangre que salieron con presión salpicaron los cojines traseros. Villalobos quedó agonizando frente al volante. Un chofer de la ruta La Limpia vio el Malibú mal estacionado y se acercó a ver qué le ocurría. En ese momento observó que su amigo estaba malherido y lo auxilió.

Abrió la puerta del copiloto y con ayuda de otras personas lo sacó. Lo subieron a su vehículo y lo trasladó hasta la emergencia del Hospital Universitario, donde los médicos certificaron su muerte, contó llena de tristeza Servilia Rosa Finol, madre de la víctima.

Sentada en una silla en el frente de su residencia, en la avenida 101 del barrio El Carmelo Urdaneta, recordó lo buen hijo que era Euclides.

Llorando, la mujer contó que su hijo trabajó como chofer de tráfico durante 30 años y acostumbraba a salir de 5:00 a 9:00 de la mañana. Luego, le entregaba el carro a sus hijos, para que siguieran ellos haciendo la ruta.

Los familiares se enteraron de lo sucedido a las 6:20 de la mañana. “Un tío llamó a la casa para avisarnos”, expresó Jessica Villalobos, sobrina del fallecido. Los hijos dolidos por la pérdida, movieron el Malibú del lugar del suceso y lo estacionaron frente a la residencia de su abuela, Servilia. Allí llegaron más de 20 compañeros de trabajo a dar el pésame.

Afligidos por lo ocurrido, bloquearon la avenida con 14 carritos por puesto. “Esto es una forma de protesta por los hechos ocurridos. Euclides era un hombre trabajador que no le debía nada a nadie. Estuvo un mes sin trabajar y al volver lo sometieron y mataron. Le decíamos que reposara y él refutaba que debía trabajar porque la situación económica estaba muy dura”, apuntó Gregorio Zerpa, presidente de la ruta Carmelo Urdaneta.

Darwin Esis, compañero de trabajo, denunció que los asaltos a choferes de tráfico cada día aumentan. “Hace dos meses me atracaron. Me sometieron, me quitaron todo el dinero y me dejaron botado en un monte. Pedimos que las autoridades tomen medidas. El hampa nos ataca de 5:00 a 6:00 de la mañana y de 8:00 a 9:00 de la noche”.

Los funcionarios del Cicpc investigan los hechos. Hasta ahora manejan el crimen como una resistencia al robo. Sin embargo, no descartan otras hipótesis hasta culminar sus averiguaciones.