“Yo me mantengo fuerte”: El escrito que Edward Ocariz, detenido en Tocuyito, envió a sus familiares

El defensor de derechos humanos y activista del partido político Primero Justicia, Edward Ocariz, suma seis semanas y un día tras las rejas luego de que, en medio de la operación “tun tun” fuese aprehendido en su vivienda, en la parroquia Coche de Caracas.
En un artículo publicado por Crónica Uno, los familiares de Edward compartieron unas palabras que escribió el propio dirigente en su primera semana privado de libertad.
En aquella comunicación escrita a mano por el activista, aseguró que “se mantiene fuerte”. “Estoy chévere, dentro de lo que cabe, le digo a la familia que se mantenga fuerte. No son situaciones fáciles, pero tengo la fortaleza cerebral y la psiquis muy bien, que es lo fundamental”, dijo Edward Ocariz a sus familiares, en una comunicación, la tarde del 8 de agosto.
Y agregó: “yo me mantengo fuerte, no necesito a mi alrededor quiebre. En Yare espero que las cosas sean más tranquilas para todos y todas”.
Sol Ocariz, hermana de Edward, relató a El Nacional en una entrevista que el también activista de la ONG Provea fue trasladado a la cárcel de Tocuyito, en Carabobo, por lo que tuvo que dejar su vivienda en Puerto Píritu, estado Anzoátegui, para llevarle ropa y comida a Ocariz.
“Lo logré ver del 5 al 8 de agosto, día en que lo trasladaron. Ese día estuve con él hasta el mediodía, le llevé comida y ropa. Resulta que cuando voy el viernes 9 de agosto, me dijeron que lo habían llevado a Tocuyito”, aseguró.
Para el 15 de agosto, solicitó a la encargada del penal acceder a una defensa privada para Edward. “Me dijo que le llevara la carta de designación del abogado y ella se lo haría llegar. Le pregunté si mi hermano estaba con la población común, donde hay personas de todos los estratos y acusados por todo tipo de delitos. Ella me dijo que los detenidos por las protestas poselectorales tienen un salón común aparte donde, al parecer, están bien”, explicó.
“Incluso me dijo que estaban de maravilla, que no me preocupara porque ellos tienen luz, agua y hasta baño, casi que lo describió como un hotel. ¿Cómo tú dices que mi familiar está bien cuando él no ha cometido ningún delito y está preso?”, expresó Ocariz.
Explica que, la defensora pública alegó “no tener información sobre Edward”. “Desde ese momento dije que no volvería a ir más a la Defensoría Pública. No tengo nada que hacer allí, debo lograr que me acepten la defensa privada”.
Para este mes de septiembre, la situación de Ocariz es la misma que la de muchos presos políticos: no se les permite una defensa privada, por lo que, su familia apela a la fe en que se haga justicia para los más de 1.800 detenidos por motivos de índole político en Venezuela.