Vinculan a Tarek El Aissami con Hezbolá

Según el Centro Simon Wiesenthal, Shimon Samuels, “el vicepresidente Tareck El Aissami, aunque presentado como druso (minoría religiosa que habita, principalmente, en Siria, el Líbano, Jordania e Israel), está estrechamente identificado con el Irán chiita, la organización terrorista Hezbolá y la familia del presidente sirio, Bashar al Assad, de quien, al parecer, fue anfitrión en Caracas”.
La institución dedicada a documentar las víctimas del holocausto y llevar registros de los criminales de guerra nazis y sus respectivas actividades, denunció que El Aissami es uno de los intermediarios entre Irán y Argentina para adelantar el plan que camuflajearía la complicidad de Teherán en el atentado de 1994 contra la Mutual Israelita AMIA en Buenos Aires, que mató a 85 personas.
“Su reciente designación asegura a Irán la posibilidad de continuar accediendo a la violencia terrorista en toda América Latina”, acusó el Centro en un comunicado.
Ariel Gelblung, representante para América Latina del Centro, agregó: “Además de estar relacionado con el narcotráfico y vinculado al movimiento guerrillero colombiano FARC, El Aissami ha heredado de Chávez el odio hacia Israel y los judíos y ahora podría continuar el antisemitismo de Maduro, amenazando aún más la vida de los judíos en Venezuela”.
Para Gelblun, el nuevo vicepresidente venezolano podría transformar el antisemitismo en una política de Estado y, además, instalar el conflicto de Medio Oriente en Sudamérica.
El exministro de Interior y gobernador del estado Aragua, de origen sirio-libanés, es uno de los principales dirigentes chavistas investigados por la DEA por narcotráfico.
Según el periodista Alfredo Meza, El Aissami, de 42 años, es el protagonista del ascenso más vertiginoso en la jerarquía chavista.
Han transcurrido 11 años entre su elección como diputado a la Asamblea Nacional y el nombramiento hecho público el miércoles”, refirió en un artículo.