Se avecinan de 90 a 120 días de oscurana [+Infografía]
No hay tregua a la oscurana. El mismo ministro de Energía Eléctrica y presidente de Corpoelec, Luis Motta Domínguez, reconoció que el servicio eléctrico podría colapsar a principios de abril. El Guri sigue descendiendo a sus mínimos históricos, hoy a 4,58 metros de la zona de colapso.
Un diluvio antes de mayo podría ser la salvación, pues la solución humana no llegaría a tiempo, en vista de que activar la energía termoeléctrica tardaría mínimo 9 meses o un año. Los bajos niveles del Guri ya son noticia vieja, pero a la fecha no se le ha buscado un ayudante. Marzo llegó acentuando el calor en el país y es poco lo que ya puede hacer la exprimida represa ante la demanda eléctrica que ascenderá entre abril y mayo a 18 mil 500 megavatios (MW) aproximadamente; “y a menos que caiga un diluvio, Venezuela vivirá una histórica oscurana de 90 a 120 días críticos”.
Así lo manifestó el ingeniero José Aguilar, quien mostró preocupación por la falta de medidas por parte de Corpoelec, “el ministro le sigue mintiendo al país diciendo que la causa de la debacle energética es por el fenómeno El Niño, o sus fábulas del sabotaje. Van 9 semanas ya en el 2016, lo único que ha hecho es hacerle perder al país valioso tiempo. Lleva 6 meses en el cargo y pudo haberlos dedicado a reparar unos 3 mil a 4 mil MW termoeléctricos de los entre 8 mil a 9 mil MW que tiene en cero MW”.
El experto explicó que ya es muy tarde para contrarrestar los racionamientos, pues aunque se intente poner en marcha más MW termoeléctricos, estos no arrojarían resultados inmediatos. “De no venir las precipitaciones que se esperan este año, el drama podría extenderse por el resto del 2016 e incluso adentrándose en el año 2017”, pronosticó. “Cada día que tarden en tomar las decisiones peor será para el país”, agregó.
El consultor internacional de sistemas eléctricos agregó que se considera necesario un racionamiento de más de 2 mil MW día de 10 a 12 horas diarias de manera rotativa los siete días de la semana, lo que podría ejemplificarse como que Caracas quedara sin luz por 8 meses. Sin embargo, han transcurrido 11 días desde las declaraciones del Ministro Motta en el que planteó “racionamiento urgente” y aún no se ha anunciado un plan, a pesar que los apagones sorpresivos sean el reflejo de la muerte sigilosa del Guri.
Ante el urgido mantenimiento, Aguilar recomendó culminar de cerrar los ciclos combinados en el Zulia, Termozulia II y III, que le darían unos 370 MW adicionales. Y así algo similar en la Planta de achaquero, “con eso se resguarda el Zulia y los Andes del país, pero difícilmente eso se puede lograr en los 90 días o 120 días críticos que se nos avecinan. Sino que en unos 9 a 12 meses se vería una marcada mejoría”, dijo.
No hay termoelectricidad
Después de 6 años del primer Decreto de Emergencia Eléctrica, seguido de otros decretos con el mismo nombre, una misión eléctrica, multas, aumento en las tarifas, plan Banda Verde y 40 mil millones de dólares en inversión para MW termoeléctricos y $ 280 millones en energía eólica, Venezuela aún depende del principal embalse, por la falta de operatividad en las plantas de energía térmica.
El ingeniero Ciro Portillo enfatizó que el problema es que no hay generación térmica para complementar la generación hidroeléctrica. “Como Corpoelec no es capaz de recuperar esas plantas, al menos una tercera parte, a medida que el Guri baje seguimos corriendo el riesgo de caer en colapso”.
Adelantó que por el bajo nivel del mar se empezarán a parar las máquinas del Guri y como consecuencia el venezolano “pagará por la ineficiencia” de la empresa eléctrica.
Recordó que Corpoelec le quedará debiendo para estos días calientes unos 2 mil 500 o más MW de electricidad al país, dado a que la demanda nacional irá por encima de los 18 mil MW y Guri no puede sostener su ritmo actual.