Propuesta de diálogo en Embajada de Suiza sin respaldo de MCM retrata nueva conspiración del G-4

En el turbulento tablero político, y más aún con la crisis tras los resultados electorales del pasado 28 de julio, el diálogo, como proceso de negociación, es considerado por la oposición unitaria, representada por María Corina Machado y Edmundo González Urrutia, presidente electo -según la ONU, la OEA y decenas de países del orbe- una ruta creada por grupos cooptados para oxigenar a Nicolás Maduro y dilatar el proceso de cambio en el país luego de 25 años de destrucción.
Por ello, la divulgación de un documento en redes sociales, por parte del Institute For Integrated Transitions (Ifit), sobre una supuesta “sesión de trabajo”, con Gilles Roduit, embajador de Suiza en Venezuela; y su jefe de Misión Adjunto, Martin Eggenschwiler, con la participación de dirigentes políticos que forman parte o tienen vínculos con el G-4 (UN, AD, PJ y VP) y la Plataforma Unitaria, desató centenares de comentarios en rechazo a lo que parece una nueva emboscada de mercenarios y conspiradores de la vieja política.
¿Quiénes serían los dirigentes y representantes de instituciones auto-potentados para participar en el encuentro? Arturo Peraza, sacerdorte jesuita y rector de la Ucab; Ana María San Juan, profesora de la UCV; Claudia Nikken, secretaria ejecutiva de la Plataforma Unitaria en Barbados; Jesús María Casal, expresidente de la Comisión Nacional de Primarias; María Eugenia Salazar, de la Junta Directiva de Conapri; Rafael Guzmán, de la Dirección Nacional de PJ; Stalin González, representante de UNT, Víctor Rago, rector de la UCV; y los políticos Ramón Guillermo Aveledo y Ramón José Medina.
Casal, decano de la Facultad de Derecho de la Ucab y uno de los pocos mencionados en la lista con rasgos comprobados de probidad y ética por su rol como presidente de la Comisión Nacional de Primarias, uso las redes sociales para referirse a la invitación: “No formo parte de ningún diálogo para participar en la reforma constitucional que está siendo promovida ni tengo conocimiento de que ese dialogo exista. He sido invitado a una reunión en la Embajada de Suiza y, si asisto, fijaré públicamente mi posición al respecto”.
En la red social X, Enderson Sequera, politólogo, fue frontal sobre lo que quieren instalar como un proceso de negociación: “María Corina Machado, ganadora de la primaria, y el presidente Edmundo González son los dos únicos líderes autorizados y legitimados por el pueblo para dirigir cualquier negociación con el chavismo. El tema de le negociación es muy simple: respetar la victoria del 28J y otorgar garantías para iniciar una transición ordenada y pacífica hacia la democracia. Todo lo demás sobra”.
¿Qué es la Ifit?
En su página web oficial, la Ifit, una ONG conformada hace nueve años, resalta entre sus objetivos la consolidación de plataforma independiente de venezolanos que busca contribuir con un proceso de diálogo y la consecución de una solución pacífica para las diferentes facetas de la crisis en Venezuela.
“El Grupo se reúne continuamente para analizar las perspectivas de una solución negociada para los diversos desafíos que afectan al país, y para desarrollar y diseminar propuestas técnicas viables que toman en cuenta las experiencias internacionales relevantes, así como las particularidades del contexto venezolano”, se lee en su portal en el que no se precisa quienes conforman el referido instituto.
Si bien en la invitación, la Ifit pone como eje de la reunión la reforma constitucional, el encuentro, con actores de “oposición” distintos al entorno de María Corina Machado y dirigentes cooptados, habría sido creado “para alentar al diálogo y al entendimiento en un contexto muy adverso, de continuidad al conflicto político (y como) espacio de intercambio para comenzar a explorar cómo podría contribuir este desafío a la transformación de la iniciativa en un nuevo pacto político”.
Algunos expertos se refieren al Institute For Integrated Transitions como una organización internacional con bastante prestigio, amparada por el Estado Suizo y orientada en intentar “reunir” en la misma mesa a opositores y oficialistas. Incluso, trascendió que sus miembros impulsaron el nacimiento del recordado Grupo de Boston, aquella comisión parlamentaria de la Asamblea Nacional de Venezuela financiada por la Organización de los Estados Americanos (OEA), entre cuyos miembros formaban parte Nicolás Maduro y John Kerry.
Sin embargo, el analista político Pedro Mario Burelli lo cuestionó en redes sociales: “La Ifit lleva años dilapidando dinero de quién sabe quién, reuniendo a personas que, en su mayoría, no representan a nadie y cuyas actuaciones pasadas los descalifican por completo para tener voz en el futuro de Venezuela”.
Las preguntas abundan. ¿Informaron a MCM sobre el encuentro? ¿Quiénes y por qué convocaron a dirigentes sin reserva moral? ¿Cuál ha sido el papel de la Embajada Suiza en temas como el de los dirigentes de Vente Venezuela convertidos en rehenes del Estado venezolano en la Embajada de Argentina? ¿Porqué convocar sin antes coordinar con la líder de la oposición unitaria? ¿Cuál es el rol de Manuel Rosales, Henrique Capriles y Henry Ramos Allup en la propuesta de diálogo? ¿A qué juegan quienes quieren normalizar la violación de los derechos humanos en Venezuela y apuestan por participar en las elecciones que impulsan para 2025 desde Miraflores?