Petición de comicios puede ser un “pote de humo”
El presidente Nicolás Maduro desde hace una semana tiene la palabra “elecciones” en la boca. El 4 de abril dijo en el marco de una jornada de trabajo: “En 2018 habrá elecciones y le vamos a dar una pela”, sin precisar si las elecciones serían regionales, presidenciales o ambas, e invitó a la oposición a que se prepare para la contienda.
El pasado domingo, la propuesta fue más emocional: “Yo estoy ansioso de que se convoquen elecciones de gobernadores y alcaldes para darles un pela, una gran derrota a esta gente muy pronto, que dejen el guarimbeo, las protestas violentas, para responderles con votos”.
Las declaraciones del jefe de Estado hay que tomarlas con pinzas porque la estrategia del Gobierno hasta ahora ha sido “no” a esas elecciones, según Luis Salamanca, politólogo, doctor en Ciencias Políticas.
“No puede querer esa elección porque va a ser una especie de radiografía previa a la elección presidencial. Teniendo esos resultados adversos, que Maduro sabe que los va a tener porque manejan encuestas de todos los días, no va a querer llegar a las presidenciales con este muerto encima de las elecciones de gobernadores”.
Para Salamanca, el ofrecimiento presidencial puede verse desde tres ópticas: podría responder a un “pote de humo” o manipulación, que pretenda aparentar separación de poderes o que sienta la presión de las protestas en el país.
La “cortina de humo”, explica el experto, es que “está vendiendo algo que es falso, porque si analizamos, todos los funcionarios del Gobierno repiten un mismo discurso; que no habrá elecciones en el 2017, que las elecciones son el año 2018, porque no tienen plata, que la prioridad es atender la crisis económica”.
Las separación de poderes “es un elemento que entra en el juego político, permite presionar al CNE, exigirle que los actores quieren elecciones y señalar: ‘ahora eres tú el que no hace las elecciones’, pero el CNE con no hacer nada tiene, como lo ha hecho hasta ahora”, sostiene Salamanca.
Finalmente, el efecto de las protestas parece haber afectado al Gobierno y “entonces trata de vaciar la presión por ahí o que es una gran manipulación para decir que quiere elecciones y es el Consejo Nacional Electoral el que no las convoca”, sentencia Salamanca.
Una orden al CNE
Según María Alexandra Semprún, politóloga, catedrática de la Universidad del Zulia, el presidente Nicolás Maduro le está dando una orden por debajo de la mesa al Consejo Nacional Electoral de realizar los comicios.
“Maduro tal vez no pueda hablar o decir abiertamente: ‘tengo la decisión de que ahora sí se hagan elecciones regionales’, pero obviamente así como dijo: ‘sugiero al Tribunal Supremo de Justicia revisar las sentencias 155 y 156’, también le está diciendo al CNE y de manera pública: ‘revisa eso del retardo de las elecciones’”.
Para Semprún, Maduro está afianzando ante el mundo la idea de que no hay un poder electoral independiente, no hay un Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) independiente, sino que todos dependen de la palabra del Poder Ejecutivo.
Desde la óptica de Luis Angarita, politólogo e internacionalista, pareciera que luego de unas semanas de intensas protestas el jefe de Estado está respondiendo a una presión tanto nacional como internacional que pide un cronograma electoral y unas elecciones que fueron suspendidas desde el mes de diciembre.
Propone a la oposición manejar el tema electoral con “mucha prudencia”. “Una de las cosas más fundamentales es el tema electoral, lo democrático, también debe mantener las exigencias por el reconocimiento institucional de la Asamblea, que también es un clamor internacional”.
La socióloga e investigadora de la comunicación, coordinadora del Observatorio de Medios en Venezuela, Maryclen Stelling, considera que “sólo con palabras, ofertas y promesas no se baja la tensión social”. Cree que únicamente bajaría la presión si el CNE ofrece un calendario electoral “que ya aparentemente no será para el 2017 sino para el 2018. Sería válvula de escape”. “El Gobierno debería buscar válvulas de escape para esta olla de presión en la que se está convirtiendo Venezuela en este momento”, dijo en el programa A tiempo de Unión Radio.