Partido Comunista de Venezuela criticó "política complaciente" de Maduro con el sector empresarial privado

El Partido Comunista de Venezuela (PCV) cuestionó este martes la “política complaciente” que pretende llevar a cabo el presidente de la República, Nicolás Maduro, al querer reunirse con representantes de Fedecámaras, para dialogar sobre las relaciones con el sector empresarial privado.

El Gobierno de Nicolás Maduro solo le da noticias favorables al empresariado, a la élite política del país, y no tiene nada que decir, y mucho menos una política coherente que ofrecer, a la clase trabajadora”, criticó Neirlay Andrade, integrante del comité central del PCV, citado de una nota de prensa.

Estas opiniones renacen desde el lunes cuando el Mandatario nacional indicó, durante una transmisión del programa "Con Maduro+" que estaba listo para reunirse con el nuevo presidente de Fedecámaras, Adán Celis, en concordancia con lo que declaró sobre el cese de las sanciones de Estados Unidos y la Unión Europea, impuestas a Venezuela.

Yo saludo esta declaración de Fedecámaras y le digo a los sectores sensatos del país, más allá de colores partidistas o ideológicos, que unamos todos los esfuerzos de Venezuela para exigir que se levanten las sanciones”, afirmó Maduro.

Ante esto, dio a conocer que cuando el directivo asuma la presidencia del organismo empresarial, de forma oficial, sostendrá una reunión con él para dialogar sobre el desarrollo económico del país.

Críticas en materia económica

Por otro lado, la líder comunista cuestionó que el “menguado ingreso” de la clase trabajadora “se pierda a través del pago de infames tributos”, entre los que mencionó el Impuesto a las Grandes Transacciones Financieras (Igtf), que grava con un 3 % las transacciones en divisas, usadas con frecuencia en el país ante la constante devaluación de la moneda local, el bolívar.

Este impuesto “termina pechando a las familias”, aseguró Andrade, quien criticó también que no haya “anuncio alguno para revertir las políticas que han liquidado” las retribuciones de los trabajadores, cuyo salario mínimo equivale a 4,4 dólares al mes, cuando el costo de la canasta básica de alimentos, calculada para una familia de cinco personas, supera los 500 dólares.

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