Informes de la Guardia Civil detallan los negocios de Delcy con comisionistas del gobierno español

El entramado político entre el gobierno de España y altos funcionarios venezolanos es más grande que lo que pueden recoger los principales diarios de investigación en Madrid, de acuerdo al resultado de las pesquisas que adelanta la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, organismo que tiene a Delcy Rodríguez, vicepresidenta venezolana, bajo la lupa por su estrechisima relación con Víctor de Aldama, líder de la trama del Partido Socialista Español (Psoe) y comisionista de diversas casos de corrupción que salpican al mandatario español, Pedro Sánchez.
De Aldama, según el diario Libertad Digital, planificó una agenda para el viaje a España de Rodríguez, en enero de 2020: “Cena en restaurante cerrado con todos los M, viene también el M de Sanidad”. Pero este encuentro albergó una persona adicional: un empresario socio de Aldama que podría ser “posible embajador y posible gestor línea crédito ESP-VEN”.
Dicho empresario debía ser el que controlase una línea de pago directa de España a Venezuela. Dinero público por mecanismos oficiales con un socio de Aldama al frente y la venia de Delcy, que había dado ya el visto bueno a ese programa de visitas”, se lee en una nota del medio, uno de los más incisivos con la relación Venezuela y España en torno a sus vínculos con la corrupción.
Libertad Digital afirma que Delcy Rodríguez entró en territorio español en un avión Falcon en la madrugada del 19 al 20 de enero de 2020 y permaneció unas horas en la sala VIP de la terminal ejecutiva del aeropuerto de Madrid-Barajas. La número 2 de Miraflores mantuvo, siempre según el diario, un encuentro secreto con el entonces ministro de Transportes, José Luis Ábalos.
Del resto tan sólo se sabe que la trama de Aldama pagó una mansión —la ya conocida como Villa Delcy— en la mejor zona de Madrid con plena privacidad para que se albergase la vicepresidenta, que la casa estuvo ocupada y que hasta se prolongó un día más la estancia inicial prevista de siete días. Quién la ocupó es aún una incógnita.
Estrecha relación
Pero hay más datos sobre la planificación de esa visita. Según un informe de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil (UCO), Aldama y Delcy Rodríguez “compartían una estrecha relación. Al menos, desde finales de 2019 y durante los años 2020, 2021 y principios de 2022. Finalmente fue decayendo a partir del primer tercio del año 2022, tal y como se observa en las conversaciones localizadas entre ambos”.
Pero en el periodo de mayor compenetración entre ambos decidieron que una persona de máxima confianza debía gestionar un gran maná de dinero: la línea oficial de crédito España-Venezuela. Y hay que recordar que Pedro Sánchez estaba al corriente de la llegada de Delcy y la bendijo con un "bien" remitido a su informador José Luis Ábalos.
Se configuró una agenda que resulta significativa por su contenido. Esta agenda fue enviada por Aldama a Delcy el día 17 de enero de 2020. En relación con esta agenda, ante el recordatorio de la reunión que debían mantener el lunes 20 a las 17:30 Felguera, Delcy responde a Aldama, confirmando que asume como propia la agenda que éste le ha remitido", añadió en su momento el informe de la UCO.
Socio estrella de Aldama
Pues bien, otro de los encuentros previstos para el día 21 de enero era con Alfredo Ruiz Plaza, con el objetivo de que fuera el gestor de esa línea de crédito. Se trata del socio estrella de Aldama. En mayo de 2018 Aldama llega a la directiva del Zamora Club de Fútbol y lo hace de la mano de su socio Alfredo Ruiz Plaza.
Ambos representaban a la inmobiliaria Grupo Vivir. Cuando los dos socios y amigos entraron en el club, el Zamora albergaba una deuda superior a los 200.000 euros, con las cuentas embargadas y con impagos. El plan de los dos socios pasó por reestructurar el club en una asamblea de socios y garantizar la existencia del Zamora transformándolo en sociedad anónima deportiva (SAD).
Además, de acuerdo con el medio, el club se vendía y, en la subasta correspondiente, la oferta del Grupo Vivir fue asumida como la que "venía garantizada", según la versión ofrecida en aquel momento. Y ese mismo socio de Aldama fue el elegido por Delcy y el líder de la trama para gestionar nada menos que la línea de crédito España-Venezuela.