El diálogo hace ruido dentro de la MUD
El camino al diálogo de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) con el Gobierno pareciera estar empedrado dentro de la misma coalición opositora.
“Se nota, es evidente y se puede destacar que en la oposición, entre los que componen la Mesa de la Unidad Democrática, hay distintos factores con posiciones muy antagónicas en relación a lo que debe ser el ejercicio propio del diálogo como principio deliberante para profundizar y ampliar las diferencias en democracia”.
Es el punto de vista de Alfonso Hernández Ortiz, politólogo, profesor universitario de LUZ, abogado, quien considera que la MUD no ha logrado tener una vocería única, compartida, estratégicamente unificada, en función de los criterios que deben tomar en cuenta al momento de definir decisiones políticas.
Aun cuando en la reunión de República Dominicana con los expresidentes Zapatero, Torrijos y Fernández, la MUD estuvo representada por Carlos Vecchio, Voluntad Popular; Luis Aquiles Moreno, Acción Democrática; Alfonso Marquina, Primero Justicia; Timoteo Zambrano, Un Nuevo Tiempo; dentro de la derecha se escuchan voces disidentes como las de María Corina Machado, Henrique Capriles y David Smolanski, entre otros.
Para el experto la disparidad de criterios en la oposición los ha llevado a estancarse, “lamentablemente”, en las discrepancias, en discusiones estériles, en declaraciones que dejan mucho que desear “y desdibujan mucho la confianza que ha depositado en ellos el pueblo venezolano, sobre todo reflejado en las elecciones del año pasado”.
“Allí hay factores que están jugando a caminos cortos, a la explosión social, a la caída del presidente Maduro, a la renuncia, otros están dispuestos a dialogar pero obviamente con otras condiciones que seguramente el Gobierno no va a aceptar, como por ejemplo la liberación de los presos políticos. Algunos supeditan el tema al referendo revocatorio, que aunque sabemos que no es competencia del Poder Ejecutivo, dado que el Consejo Nacional Electoral debería ser un poder independiente, influye en ese tema”.
Negocios con traidores
Jorge Govea, magíster en Ciencias Políticas, abogado, profesor de la escuela de Ciencias Políticas y Derecho de la Universidad del Zulia, comulga con la tesis de Hernández Ortiz. Plantea que los liderazgos dentro de la MUD están lejos de estar de acuerdo en muchísimas cosas.
“El planteamiento estratégico es ciertamente la Unidad, eso nos da buenos resultados, vamos a mantenerla, pero prácticamente lo que los une es la necesidad de salir del chavismo y del Gobierno”.
El experto cree que esos factores “están acusando a aquellos que quieren negociar con traidores, de no responder a las necesidades del pueblo, de plantear una agenda transparente sobre el tema. La MUD tiene que sentarse y anunciar al país sobre qué va a negociar con el Gobierno”, dice.
“Hay un sector que plantea que ese diálogo ni es necesario, ni hace falta, ni es posible, pero sin plantear mayores alternativas. Hay sectores radicales de la oposición que practican lo que se conoce en Ciencias Políticas, en negociación política, como el maximalismo, que plantea que es todo o nada. Es decir yo no estoy dispuesto a ceder, no estoy dispuesto a entenderme con el otro en función de intereses superiores”.
Rechazan acercamiento
De acuerdo con María Corina Machado, presidenta del Movimiento Vente Venezuela, “un diálogo promovido por la Unasur del señor Samper y con ‘mediadores’ que representan al régimen, sería un error de dimensiones históricas”, El gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles Radonski, aseguró este lunes que la oposición no va a negociar los derechos de los venezolanos.
Las ideas y propuestas para salir de la crisis están del lado de ellos y no tienen miedo a debatirlas con el Gobierno, enfatizó. David Smolanski, alcalde del Hatillo y dirigente de Voluntad Popular, dijo que la MUD no cree en los diálogos “con una pistola en la nuca”.
Señaló que es necesaria la liberación de los presos políticos, el regreso de los exiliados y la atención de la crisis de medicamentos.
Voces plurales
Para Libio de los Ríos, politólogo y profesor universitario, “es muy normal que en un frente diverso y por lo tanto muy plural haya voces que de pronto no estén plenamente de acuerdo con algunos aspectos y otros sí están de acuerdo con un mínimo. Podemos decir que como son un grupo tan diverso y tan plural hay voces que de alguna forma son disidentes, que dicen nada que ver, ni siquiera hablar con el Gobierno”.
Según el especialista, una cosa es la unanimidad y otra cosa bien distinta es el consenso.
“Hasta ahora hay gran consenso entre las fuerzas principales por ir al diálogo, pero más que ir al diálogo por ir a una conversación donde se bajen los niveles y las cosas fluyan. El Gobierno debe dar muestras de compromiso no de promesas”.