Repsol iniciará la etapa final de limpieza de playas en Perú esta semana

Repsol aseguró que esta semana entrará en la etapa final de limpieza de las playas que el pasado 15 de enero fueron afectadas por un derrame de petróleo hacia el mar desde la refinería La Pampilla, en la provincia limeña del Callao.
"Esta semana estamos entrando en la etapa final de limpieza de las playas. Queda poco hidrocarburo por retirar, y se encuentra básicamente acumulado en algunas zonas rocosas de difícil acceso", señaló la petrolera española en un comunicado difundido este lunes.
La empresa informó que en los últimos días se han instalado más de 1.600 metros de pompones absorbentes en peñas, acantilados y cerca de la orilla de las zonas afectadas y que "el objetivo es evitar que la marea y el viento ensucien nuevamente la arena en playas ya limpias".
Agregó que esta fase necesita de "un trabajo más minucioso", en el cual colaboran expertos como Edward Owens, un "referente mundial en situaciones de este tipo", que ha sido contratado para aplicar la metodología SCAT, "una técnica internacional de evaluación del litoral que busca determinar las mejores prácticas en función de las características del terreno".
Con el objetivo de retirar el cien por ciento el hidrocarburo y fijar el hito del fin de la limpieza, en el operativo participan 56 empresas y profesionales de 17 países, además de 2.500 personas que trabajan directamente en el mar y las playas de Lima y el Callao que fueron impactadas por el crudo.
El derrame, que afectó playas de Lima y el Callao, se produjo en el terminal número 2 de la refinería La Pampilla, en el municipio de Ventanilla, al soltarse o desprenderse presuntamente la plataforma de colectores, en coincidencia con un nivel inusitado del mar a causa del tsunami generado por la erupción volcánica en Tonga.
El litoral peruano recibió el vertido de unos 10.396 barriles de crudo, según datos de la empresa, que en un principio señaló que habían sido 6.000 barriles, mientras que las autoridades peruanas aseguran que fueron 11.900 barriles.
Repsol precisó la semana pasada que el área afectada alcanzó los 105 kilómetros cuadrados, una superficie muy superior a los 11,9 kilómetros cuadrados que había informado el Gobierno peruano.