Papa Francisco visitó cárcel de Roma este Jueves Santo sin usar cánula de oxígeno

El Papa Francisco visitó este Jueves Santo la cárcel Regina Coeli. Recibido por la Directora de la Prisión, Claudia Clementi, y por el personal, llegó a la rotonda principal, donde se encontró con unos 70 reclusos, de diversas nacionalidades, que participan regularmente en las actividades y catequesis organizadas por el Capellán del Instituto.
El sumo pontífice vive esta Semana Santa en plena convalecencia por sus problemas respiratorios que lo tuvieron en el hospital durante 38 días, hasta el 23 de marzo, citó Infobae.
“Lo vivo como puedo”, respondió el pontífice con un hilo de voz, pero sin cánula para garantizar el flujo de oxígeno vital, desde la ventanilla del coche a su salida de la prisión, preguntado por los medios cómo vive estos días importantes en su estado.
Además, confesó un pensamiento que le asalta siempre que visita un lugar así: “Cada vez que entro en un lugar como este me pregunto por qué ellos y no yo”, reflexionó ante los micrófonos.
Antes, al inicio de la corta entrevista, se permitió bromear con la reportera que en medio del tumulto de medios le preguntó “¿Cómo está?“. Sonriendo, contestó: “Estoy sentado".
Tras un breve saludo del Director, que expresó el agradecimiento de toda la comunidad por la visita, el Papa Francisco expresó su deseo de estar presente entre los internos: “Me gusta hacer cada año lo que Jesús hizo el Jueves Santo, el lavatorio de los pies, en la cárcel”.
Y añadió: “Este año no puedo hacerlo, pero sí puedo y quiero estar cerca de ustedes. Rezo por ustedes y por sus familias”.
Al final de un momento de oración, el Papa saludó individualmente a cada uno de los presos en la Rotonda. Por último, se dirigió de nuevo a los presentes para rezar juntos el Padre Nuestro e impartir su bendición. La visita duró unos 30 minutos.