Migrantes venezolanos varados en Tapachula realizan "chambitas" para sobrevivir
Los migrantes venezolanos que permanecen varados en el parque central de Tapachula, en México, ante el endurecimiento de las políticas migratorias en EE. UU., sin duda enfrentan situaciones difíciles para subsistir; sin embargo, algunos que tienen algún oficio realizan trabajos para cubrir la cubrir sus necesidades básicas.
Tal es caso de Luis Peña, un venezolano quien llegó a Tapachula desde hace una semana junto con su esposa y su niña de 5 años, con la intención de cumplir el sueño americano, pero la situación ha sido complicada al no contar con recursos para comprar sus alimentos.
En un reportaje especial redactado por el periodista Marvin Bautista, del periódico azteca Diario del Sur, relata cómo Luis tiene conocimientos en mecánica automotriz y durante estos días la logrado conseguir algunas "chambitas", a través de las cuales ha logrado obtener recursos económicos para comprar comida, agua y algunas golosinas para su niña, ya que permanecen a la intemperie en el parque central.
Contó que aprendió el oficio de mecánica automotriz de manera empírica desde los 12 años con apoyo de su tío y con el paso de los años fue perfeccionando sus conocimientos, y afortunadamente esto le ha ayudado a subsistir durante su tránsito migratorio
Hace ratos estaba cargando el celular y ví que a una señora no le encendía su vehículo, me acerqué para ayudarle y al revisar constaté que era una cuestión eléctrica y realicé unos ajustes, y en agradecimiento me dio 200 pesos, que me servirá para comprar comida".
Indicó que así como este trabajo en la semana que ha estado en el parque ha tenido la fortuna de que dos vehículos más hayan presentado fallas y los ha arreglado, de cuyas "chambitas", ha obtenido alrededor de 500 pesos, dinero que le ha sido de gran ayuda para sobrevivir.
Dijo que salió de su país en el 2016, y durante este tiempo se estableció en Bogotá Colombia, en donde trabajó como mecánico en un taller y a través de este empleo logró cubrir el pago de renta, y las necesidades básicas de su pequeña familia.
Salimos de Colombia desde septiembre en busca del sueño americano, y la situación en el camino no ha sido nada fácil, afortunadamente tengo este oficio, el cual me ha ayudado para obtener unas cuantas monedas, porque venimos a pura voluntad de Dios", sostuvo.
Mencionó que el panorama ante las políticas migratorias es complicado, por lo que ha decidido permanecer por un tiempo en esta ciudad y buscará emplearse en un taller mecánico para poder obtener recursos y así salir adelante junto con su familia, ya que no es opción retornarse a su país.