Juez remueve bajo condiciones órdenes contra Argentina por deuda en default
El juez federal estadounidense Thomas Griesa anunció el viernes que removerá bajo condiciones sus órdenes contra Argentina en el litigio por títulos en default desde 2001, al responder a un pedido de la defensa tras su oferta a fondos especulativos para saldar la cuestión.
“La Corte indica ahora que removería las órdenes si se cumplen las dos condiciones precedentes”, escribió el magistrado de Nueva York, precisando que Argentina debe anular sus legislaciones que impiden un acuerdo y pagar a los acreedores que hayan aceptado su oferta hasta el 29 de febrero.
Según el texto, las condiciones son “(1) La República rechaza todos los obstáculos legislativos a un acuerdo con los tenedores de bonos, incluyendo la Ley Cerrojo y la Ley de Pagos Soberanos; (2) Para todos los acreedores que sellaron principios de acuerdo con la República antes o el 29 de febrero de 2016, la República debe hacer pago completo de acuerdo con los términos específicos de cada acuerdo”.
Griesa necesita además de la autorización de la corte de apelaciones para adoptar la medida, ya que hay un planteo argentino preexistente que debe ser resuelto en esa instancia.
El gobierno argentino pidió el 11 de febrero a Griesa que levantase la orden del ‘pari passu’ o tratamiento equitativo a favor de esos fondos, de modo de poder avanzar con su oferta para resolver el litigio por títulos en default desde 2001.
La nueva administración del presidente de centroderecha Mauricio Macri presentó el pasado 5 de febrero una propuesta para pagar 6.500 millones de dólares, sobre un total de 9.000 millones, a los fondos especulativos NML Capital y Aurelius y otros acreedores.
EM Limited y Montreux Partners, dos de los seis principales fondos que ganaron juicios con sentencia firme en Nueva York, aceptaron esa oferta, por la cual cobrarán 849,2 millones y 298,66 millones de dólares, respectivamente.
Sin embargo, otros querellantes y NML Capital y Aurelius, que en 2012 lograron una sentencia favorable para cobrar una deuda que hoy asciende a 1.750 millones de dólares, han rechazado por el momento la propuesta y se oponían a la aprobación de la moción argentina.