Guerrilla urbana asume responsabilidad de la explosión en Antenas
El grupo de guerrilla urbana Combatientes del Pueblo asumió hoy la responsabilidad de la bomba que explotó la semana pasada ante el Tribunal de Apelaciones de Atenas, sin causar víctimas, pero sí cuantiosos daños materiales.
En un comunicado, el grupo afirma que la justicia se ha convertido en un "puntal" de las políticas "antisociales" aplicadas durante los años que Grecia lleva sometida a los programas de ajuste.
"La justicia es como las serpientes. Sólo muerde a los descalzos", señala la nota, en la que también se ataca al Gobierno y al primer ministro griego, Alexis Tsipras, de quien se afirma que se ha convertido en el "mas fiel servidor de los acreedores imperialistas."
La bomba explotó en la madrugada del viernes pasado ante el citado tribunal, tras una llamada de advertencia a un periódico.
En esa llamada, una persona afirmó que no se trataba de una broma y exigió que se desalojara el edificio de la corte y el colindante.
La explosión causó numerosos daños en la fachada del inmueble e hizo estallar cristales en los alrededores.
La bomba de relojería se encontraba en una mochila depositada por dos personas, que posteriormente huyeron en un coche que les esperaba cerca.
El guarda del edificio señaló que, tras ver aparecer a dos hombres con una mochila, salió para detenerlos, pero en ese momento el conductor del vehículo comenzó a disparar y tuvo que buscar refugio.
Horas después, la policía halló una furgoneta incendiada en el barrio de Exarjia, centro del movimiento anarquista, que se presupone fue el vehículo utilizado para el ataque.
El anterior incidente de este tipo tuvo lugar el pasado 20 de abril, cuando un artefacto estalló ante una sucursal del Eurobank, en el centro de Atenas, un ataque reivindicado después por el mismo grupo.
En aquella ocasión, Combatientes del Pueblo denunció en un comunicado la forma en la que el banco gestionaba la cartera de créditos morosos.
Este tipo de ataques, que normalmente causan daños materiales pero no personales, son relativamente frecuentes en Grecia y en los últimos años suelen ser reivindicados por miembros del entorno anarquista.