Explosiones de Beirut reavivan las protestas contra el Gobierno [+Fotos]

Un grupo de personas, liderado por oficiales retirados del ejército libanés, tomó por asalto el Ministerio de Relaciones Exteriores y lo declararon “la sede central de la revolución”.
El asalto, retransmitido por las televisiones locales, se produjo mientras las fuerzas de seguridad se concentraban en mantener el orden en la tensa manifestación, celebrada a unos pocos centenares de metros del Ministerio, que reunió a miles de libaneses.
La marcha se convocó frente al Legislativo y ya se están produciendo los primeros enfrentamientos con los policías, que arrojan bombas de gas y gases lacrimógenos a los manifestantes, mientras estos les lanzan piedras.
La protesta, convocada bajo el nombre de “Día de la Ira”, reúne a miles de personas en la simbólica Plaza de los Mártires y, al grito de “Dimisión”, un grupo intentó entrar en el Parlamento a la fuerza. No lo lograron pero sí consiguieron ingresar al Ministerio de Exteriores.
Poco antes de los enfrentamientos, la gente comenzó a reunirse en el lugar para expresar su rechazo al Gobierno y al régimen político al que responsabilizan de la grave crisis y el deterioro en que ha caído el Líbano.
Hablamos y hablamos, pero nadie nos escucha”, dijo a la agencia de noticias EFE una de los manifestantes, que acudió a la convocatoria llena de indignación por la explosión de 2.750 toneladas de nitrato ni amonio almacenados desde hace seis años en el puerto de Beirut.
“Vengo como un ciudadano que quiere asegurar su futuro”, declaró otro joven de 18 años, que llevaba una flor blanca como símbolo de las almas de los muertos en la explosión.
El siniestro, que ha dejado más de 150 muertes, al menos 60 desaparecidos y miles de heridos y a entre 200.000 y 250.000 personas sin casa, se produjo en medio de una crisis económica y política que ya provocó masivas manifestaciones contra el régimen sectario del Líbano en septiembre.