Detienen a Vance Boelter, el sospechoso del atentado político en Minnesota
Los investigadores afirman que Boelter estaba disfrazado de policía cuando perpetró los ataques. El sospechoso está por el momento acusado de dos cargos estatales de asesinato en segundo grado. Los fiscales federales pueden presentar sus propias acusaciones por delitos federales
La policía de Minnesota detuvo este domingo a un sospechoso involucrado en el atentado contra dos legisladores estatales y lo puso bajo custodia, según varios medios de comunicación, incluido CBS News.
Se trata de Vance Luther Boelter, de 57 años, quien era buscado por las autoridades por el asesinato el sábado de la legisladora estatal demócrata Melissa Hortman y su esposo Mark.
El senador estatal John Hoffman y su esposa Yvette, las otras dos personas que fueron tiroteadas pocas horas antes, lograron sobrevivir al ataque.
En una publicación de Facebook, la oficina del sheriff del condado de Ramsey publicó una foto del sospechoso y afirmó: "El rostro del mal. Tras un trabajo policial incansable y decidido, el asesino se encuentra ahora bajo custodia".
Los 2000 y, de acuerdo a su amigo David Carlson, sería afín al gobierno de Donald Trump y férreo opositor de derechos como el aborto o las demandas de la comunidad LGBT.
Carlson habló con los periodistas el sábado por la noche y declaró que el hombre de 57 años había enfrentado serios problemas económicos y de salud mental en el último tiempo. "Simplemente se dio por vencido en la vida por alguna razón", dijo Carlson, de acuerdo al New York Times.
Los investigadores afirman que Boelter estaba disfrazado de policía cuando perpetró los ataques y tenía un vehículo que parecía un coche patrulla, equipado con luces de emergencia intermitentes.
El sospechoso está por el momento acusado de dos cargos estatales de asesinato en segundo grado y otros de intento de asesinato en segundo grado. El asesinato en segundo grado, sin premeditación, está castigado con penas de hasta 40 años de cárcel. Los fiscales pueden modificar la acusación. Los fiscales federales pueden presentar sus propias acusaciones por delitos federales.