Cuba da la media vuelta a Venezuela y se acerca al imperio
Ante el debilitamiento de la economía venezolana, especialmente por la terrible bajada del precio del petróleo, amén de que otras latitudes no le resultaban tan beneficiosas a La Habana, el presidente Raúl Castro, ayudado por la intervención del Papa Francisco, decidió, hace un año, dar la vuelta, buscar un nuevo salvavidas, mirar y extenderle la mano a los Estados Unidos, con el anuncio del inicio del proceso de diálogo entre diplomáticos de ambos países, que se inició nada más y nada menos que con una conversación telefónica entre los presidentes Barack Obama y el propio hermano de Fidel Castro.
Este primer paso, ocurrido en diciembre de 2014, ha permitido las aperturas de las embajadas de ambos países, cerradas hace más de medio siglo. Que líneas aéreas y firmas comerciales comiencen a utilizar el mercado cubano para expandirse y hasta que peloteros de las Grandes Ligas, salidos de la isla como desertores, regresen y se reencuentren con sus familiares y amigos, que no veían desde que se marcharon para buscar “el sueño americano”.
Hubo otros “pasos” que se dieron, pero el más relevante ocurrió el 11 de abril, cuando ambos presidentes (Raúl Castro y Barack Obama) sostuvieron un encuentro en ciudad de Panamá, durante la VII Cumbre de las Américas.
“Después de medio siglo de una Cuba aislada, ellos han entendido que la mejor forma de integrarse al mundo es a través del diálogo y acuerdos bilaterales que los ayudarán a salir, en un mundo tan complejo, de la mayoría de los problemas sociales, económicos y hasta en lo político”, destacó el internacionalista Milos Alcalay.
En este proceso que apenas lleva un año, “tanto Cuba como Estados Unidos han ganando, pero voy más allá, creo que quien ha ganando más es el mundo. Es que ahora Cuba acepta la diversidad política del continente, por ejemplo, y esto le resulta de mucho beneficio, porque ha servido para acercarse a grandes potencias y hasta a la propia Unión Europea”, razonó Alcalay.
Igual forma de pensar muestra el experto Sergio Urdaneta. “Con esta apertura y acercamiento entre Estados Unidos y Cuba ha ganado todo el mundo, especialmente los antillanos, porque todo el que se aísla pierde. Ellos han estado perdiendo mucho desde hace más de 50 años. Y tengo obligado que mencionar a Venezuela, porque es lo que está ocurriendo aquí, porque mientras el mundo se está interconectando, el Gobierno venezolano busca aislarse”, explicó Urdaneta.
Fortalecimiento económico
Desde el pasado 20 de julio la bandera cubana fue izada en la embajada de la isla en Washington D.C. en cuya ceremonia solemne de apertura de la sede estuvo encabezada por el canciller Bruno Rodríguez, quien se reunió ese mismo día con su homólogo John Kerry, en la sede del departamento de Estado. Igualmente ocurrió en La Habana, en donde comenzó a blandirse la bandera de las barras y las estrellas.
Los resultados parecen estar latentes, especialmente en el sentido económico. “La economía de Cuba se fortalece con la llegada de los turistas, especialmente aquellos que dejan dólares y euros. Por otro lado, los cubanos que están fuera de ese país, al enviar remesas en dólares también dinamizan la economía antillana. La economía crece con la entrada de esas divisas”, dice el doctor Urdaneta.
En tal sentido, el experto considera que los intercambios culturales, sociales y económicos ayudan a ese país caribeño, pero que Estados Unidos también sale beneficiado, porque las regiones que tienen la necesidad de vender sus productos encuentran en Cuba una buena y cercana opción y “en la medida que las sociedades se abran, la democracia también se beneficia. Uno puede estar de acuerdo o no con el régimen cubano, pero ellos necesitan cambiar y así lo han entendido, tanto los cubanos como los propios estadounidenses”, argumentó.
“Muchas de las medidas unilaterales propuestas por el gobierno de Estados Unidos -como la autorización del transporte aéreo y marítimo, la exportación de tecnología de comunicación o las transacciones financieras relacionadas con el uso de tarjetas de crédito- aún esperan por acciones recíprocas del gobierno de Cuba”, explicó Jorge Duany, del Cuban Research Institute, de la universidad de Florida, declaración que fue publicada por el diario cubano La Prensa.
Algunas trabas
La periodista disidente Yoani Sánchez, una de las más incrédulas profesionales sobre el tema, publicó un artículo titulado "Ni McDonald's, ni libertad" en el que explica que “2015 prometía ser el año del despegue económico y de la apertura, pero doce meses después los hechos se quedan muy lejos de las ilusiones".
Y a pesar de que algunas líneas aéreas ya realizan rutas comerciales semanales con destino a La Habana, y unas 400 compañías extranjeras han manifestado su interés en invertir en la Zona Especial de Desarrollo (ZED) Mariel, como lo publicó recientemente el diario El Economista, de Cuba; el bloqueo que Estados Unidos impuso a Cuba aun no ha podido “derrumbarse”. El propio Obama lo ha solicitado al Congreso estadounidense, pero como no ha habido respuestas, el problema sigue allí, latente y es la mayor traba que ataja la propuesta de acercamiento bilateral.
Entre las firmas cien por ciento de capital extranjero a las que se refiere el diario El Economista, se hallan las mexicanas Richmeat, productora de embutidos de carne, y Devox Caribe, fabricante de pinturas, mientras que España tiene presencia mediante Profood Service, abastecedora de alimentos y bebidas para el sector hotelero, BDC-Log y BDC-Tec, ambas de Bélgica, que trabajarán en la actividad logística y de altas tecnologías, respectivamente, y BrasCuba, productora de cigarrillos, compuesta por Brasil y Cuba.
Existe gran expectativa para el año 2016, para conocer los avances o estancamientos que se presenten en la reapertura cubano-americana, que tanto interés mundial ha mostrado.