Conmoción en Argentina: Tiró a su novia por las escaleras, la quemó y la descuartizó

El sábado pasado, en Valle Viejo, en el norte de Argentina, un joven de 19 años de edad asesinó a su novia de 24 años de edad después de una discusión en la que la empujó por las escaleras. Luego de confirmar que estaba muerta, la envolvió con una manta gruesa de cama y le prendió fuego en una parrilla.
De acuerdo con la información publicada por el diario El Ancasti, el agresor, identificado como Naim Vera, cuando se dio cuenta de que no podía hacer desaparecer el cuerpo de esa forma, lo desmembró, lo guardó en cajas y bolsas y por último lo arrojó en un contenedor ubicado a cuadras del departamento en que ocurrió el feminicidio.
Al regresar, confesó el crimen. Vera volvió a casa de sus padres, Oscar Vera y Marcela Menem, y les relató lo ocurrido. Después, concurrió junto con su abogado a la Brigada de Investigaciones, donde se entregó.
Las primeras versiones dicen que el asesinato tuvo lugar el sábado entre las 4:00 de la mañana y las 8:00 am.
"Vera quedó registrado en una de las cámaras de seguridad del Puesto Caminero Las Rejas. A esa hora pasó por el lugar hacia el kilómetro 11 a bordo de su camioneta Fiat Toro. Llevaba los restos de la joven Brenda Micaela Gordillo, a quien había quemado minutos antes en un departamento en Ayacucho 68", de acuerdo con lo publicado por el diario catamarqueño.
Reclaman justicia
El lunes en la tarde habrá una movilización en la plaza 25 de Mayo, en Catamarca, bajo el hashtag #JusticiaParaMicaela. La convocatoria fue realizada por allegados de la joven y la organización Ni Una Menos de esa provincia.
Respecto a los motivos de la discusión que llevó a la muerte de la mujer, las autoridades creen que mantuvieron una pelea porque Gordillo había quedado embarazada y Vera quería que abortara.
Al momento de deshacerse del cuerpo, Vera condujo hasta el kilómetro 11 y dejó el cadáver semienterrado.
Minutos más tarde fue controlado por personal policial, que le pidió los papeles. Sin embargo, lo dejaron ir porque no notaron nada extraño.