Biden “sigue de cerca” situación en Siria y mantiene contactos con aliados en Medio Oriente
La Casa Blanca confirmó que Biden mantiene contacto constante con sus aliados en Oriente Medio mientras se desarrollan estos extraordinarios acontecimientos. En las primeras horas de este domingo, los insurgentes sirios, liderados por Hayat Tahrir al Sham (HTS), proclamaron a Damasco como una ciudad “libre” del régimen de Bashar al Assad
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, está monitoreando "de cerca" la situación en Siria, donde los insurgentes han tomado Damasco en un avance fulminante que amenaza con redefinir el mapa político del país.
La Casa Blanca confirmó que Biden mantiene contacto constante con sus aliados en Oriente Medio mientras se desarrollan estos extraordinarios acontecimientos.
“El presidente Biden y su equipo están siguiendo de cerca los extraordinarios acontecimientos en Siria y permanecen en contacto constante con los socios de la región”, declaró Sean Savett, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, en un mensaje publicado en la red social X.
En las primeras horas de este domingo, los insurgentes sirios, liderados por Hayat Tahrir al Sham (HTS), proclamaron a Damasco como una ciudad “libre” del régimen de Bashar al Assad, a quien acusaron de abandonar el país en un avión "especial" con destino desconocido.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, una ONG con sede en Reino Unido, reportó que Al Assad salió del aeropuerto de Damasco poco antes de que los insurgentes consolidaran su control sobre la capital.
La ofensiva insurgente, que comenzó el 27 de noviembre, tuvo un ritmo vertiginoso. En menos de dos semanas, las fuerzas rebeldes desmoronaron las defensas gubernamentales en puntos clave del país.
Tras tomar Alepo, la segunda ciudad más grande de Siria, y posteriormente Hama, los insurgentes avanzaron hacia Damasco mientras tres capitales de provincia en el sur se levantaban en rebelión y quedaban bajo control de facciones locales opositoras.
La coalición que lidera la ofensiva, integrada por grupos islamistas y facciones respaldadas por Turquía, declaró en un comunicado que Damasco estaba “libre del tirano Bashar al Assad”.
Desde Washington, la administración Biden se encuentra en consultas con socios regionales para evaluar el impacto estratégico de estos hechos, mientras el destino de Al Assad y el futuro político de Siria permanecen inciertos.