Editorial | La línea editorial del Diario Versión Final es innegociable

Los principios y valores de quienes han hecho posible que nuestra ventana informativa y de opinión sea hoy un referente para los venezolanos, tanto dentro como fuera del país, se han mantenido firmes y valientes ante un régimen autoritario que no ha logrado doblegarnos mediante el terror o la compra de conciencias.
En VERSIÓN FINAL, hemos actuado apegados a las leyes de la República y a la ética periodística, respetando el sagrado derecho a la libertad de expresión, información, pensamiento y conciencia.
Fuera de nuestra Constitución Nacional, solo nos doblegamos ante las leyes de Dios.
Somos incólumes frente a quienes atentan contra los derechos humanos, así como ante la corrupción y la mediocridad política que los ciudadanos venezolanos hemos padecido durante los últimos 30 años, impidiendo hasta ahora triunfar frente a este modelo de franquicia cubana.
Hoy, por segunda vez, se nos ha cobrado esta firme posición editorial sumando nuestro medio a los bloqueos selectivos para acallar al periodismo combativo, medida similar a la que ya han tomado contra decenas de medios de todo el país en una clara estrategia por limitar la libertad de información.
La primera vez fue cuando llegamos a liderar el periodismo impreso en el occidente venezolano. Luego de un arduo trabajo periodístico y de todo un conjunto empresarial, Versión Final llegó a las más altas cotas de tirada, tanto en número de ejemplares como en número de páginas en cada edición.
La aceptación y el crecimiento escalaban a toda velocidad.
Pero entonces ya no hubo más papel para el Diario. Así había pasado con otros tantos medios relevantes en Venezuela.
Silenciaron ese maravilloso sonido de nuestra rotativa al imprimir el periódico que los ciudadanos habían adoptado como parte de su familia. Ahora, por segunda vez, nos bloquean, y en esta ocasión han ido contra nuestro dominio que nos acompañaba desde 2006.
En ningún momento nos precipitamos a divulgar la noticia que ya estaba confirmada puertas adentro de nuestro Diario, sino que emprendimos todas las labores posibles por confirmar y reconfirmar con organizaciones aliadas de la prensa libre, incluyendo contactos directos con NIC VE, la instancia de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones de Venezuela (CONATEL) encargada de gestionar los dominios .ve propiedad del Estado venezolano. Pasaron las horas y no contestaron.
Mantuvimos el contacto directo con el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP), y con la organización VE Sin Filtro, encargada de un monitoreo e investigación de bloqueos selectivos en Venezuela y ellos también ejecutaron sus investigaciones para publicar los resultados de lo que ya era un hecho contrastado. Nos habían quitado el dominio.
Pero es que además, el bloqueo iniciaría radicalmente desde el 1 de agosto, cuando Versión Final amasaba exponencialmente visitas desde dentro y fuera de Venezuela desde los días previos y durante las jornadas de las elección presidencial del 28 de julio y las horas posteriores.
Pese a la situación Versión Final continuó informando a través de las redes sociales y grupos de difusión.
Y hoy ya volvemos al ruedo con nuestra web a la que pueden entrar desde diarioversionfinal.com esa ventana digital en la siempre nos encontrarán con nuestra pasión por el periodismo, un periodismo hecho desde el Zulia para Venezuela y para el mundo.
Agradecemos a todos nuestros lectores que han mostrado su gran afecto por el Diario, a los medios aliados, hermanos en las luchas por la libertad de expresión, que se hicieron eco del bloqueo en contra nuestra, a los tantos periodistas de los que hemos recibido el respaldo y ese mensaje de fuerza.
Nuestros periodistas continúan en las calles, tomando el pulso a la noticia, y nuestros articulistas seguirán teniendo un espacio para sus escritos.
Versión Final seguirá haciendo periodismo.
Carlos Alaimo
Presidente-Editor