"Niño ángel" llegará a España con mensajes para Zidane y James
Al colombiano Johan Alexis Ramírez Castro, conocido desde la tragedia del Chapecoense como el "niño ángel", le gustaría pedirle a Zinedine Zidane, en la visita que hará al Real Madrid, que incluya en más partidos a su James Rodríguez para que retome su nivel, dijo en una entrevista con Efe.
Por invitación de la Fundación Real Madrid, el joven de 15 años viajará el próximo jueves a Madrid a conocer a la plantilla merengue y asistirá dos días después en el estadio Santiago Bernabéu al partido con el Espanyol.
"Me gustaría decirle a Zinedine Zidane que le ayude a James y lo meta más a los partidos para que vuelva coger el nivel que tenía antes", dijo el adolescente.
El "niño ángel", después de ser condecorado en Brasil con la Orden de Río Branco, cumplirá el sueño de conocer a las estrellas del Real Madrid como un reconocimiento por haber guiado en medio de la oscuridad de la noche del pasado 28 de noviembre a los socorristas de la tragedia aérea que dejó 71 muertos y seis sobrevivientes en Colombia.
Su habilidad para moverse en "Cerro Gordo", renombrado "Cerro Chapecoense" en el municipio de La Unión, sitio donde ocurrió el accidente del avión de Lamia, permitió salvarle la vida al futbolista Alan Ruschel, entre otros, pues llevó a los equipos de rescate por el camino correcto.
Desde ese siniestro que empañó la final de la Copa Sudamericana entre Chapecoense y Atlético Nacional, el teléfono de Johan no para de sonar, como lo hizo hace algunos días cuando el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, lo llamó para decirle de su viaje a España.
"El alcalde primero me dijo que cuál era el mejor equipo del mundo. Le respondí que el Real Madrid", contó el joven, a quien la sola idea de realizar un segundo viaje internacional -el primero fue a Brasil al homenaje- le pareció inicialmente "un chiste o algo así".
Además de conocer a Cristiano Ronaldo, fantasía que mueve a cualquier niño de su edad, Johan visualiza lo que puede ser el encuentro con James, el compatriota que lo marcó con el "golazo de pechito y de media volea de zurda" que le encajó a Uruguay en el Mundial de Brasil 2014.
Anhela agradecerle por lo que ha hecho y decirle que es "muy buen jugador, que siga adelante" ahora que el "10" merengue superó una lesión y necesita sumar minutos.
"Si Zidane la da la titular otra vez a James (sería) muy bueno. Pero también James tiene que ponerse las pilas", reflexionó sobre la situación de su compatriota desde la humilde casa que sus padres rentan en la vereda "Fátima", en el municipio de La Ceja, cercano a Medellín.
Además de esos mensajes para Zidane y James, Johan llevará a España una camiseta del Real Madrid que espera traer repleta de autógrafos para quizá colgarla en la casa que fue donada a su familia y que le cambiará la vida especialmente a su padre, Miguel Ramírez, un agricultor que todos los días camina una hora y atraviesa el sitio del accidente para ir a trabajar en un cultivo de tomate.
"Lo mejor es la alegría de mi papá con la casa que nos van a regalar en La Unión", dijo al pensar en los cambios que ha experimentado su vida luego de más de dos meses de la tragedia.
Además de volverse popular en el colegio donde cursa grado décimo, el "niño ángel" ha tenido que atender hasta siete entrevistas en un día luego de esa horrible noche en la que junto a su papá decidieron pernoctar en un "cambuche", a solo metros del lugar donde la ilusión de un equipo tan modesto como Johan se derrumbó.
Ahora que alista la maleta para viajar a Europa, que ha recibido algunos estímulos materiales y que tiene planes diferentes para su futuro con la posibilidad de cursar la carrera universitaria de contaduría, el hijo mayor de la familia Ramírez Castro no deja de pensar en las personas que perdieron la vida frente a sus ojos.
"Nosotros daríamos todo lo que hemos tenemos porque esas 71 víctimas estuvieran vivas", sentenció.
También piensa en los sobrevivientes y en la manera cómo le podría reconstruir la noche del milagro al defensa del Chapecoense Alan Ruschel, el primer sobreviviente que ayudó a rescatar y a quien no ha tenido el placer de conocer.
"Me sentiría muy orgulloso de conocer a la persona que yo pude ayudar", confesó Johan.
En medio de esa tragedia que hermanó a Colombia y a Brasil, y que estremeció a la familia del fútbol, el "niño ángel" no habla de sus minutos de fama o de los elogios recibidos.
Para él, esa noche en la que su padre lo despertó para ir a auxiliar a los sobrevivientes del trágico accidente, solo hizo lo que su corazón le dictó.
"Nunca imaginé que por medio de una tragedia la vida me iba a cambiar tanto. Nosotros ese favor no lo hicimos por un objeto material. Solamente lo hicimos porque nos nació del corazón y por cosas de Dios salimos beneficiados", declaró el ángel del Chapecoense.