Métodos de Ancelotti y Guardiola inspiran a Zidane
Marcelo Lippi, Carlo Ancelotti, Marcelo Bielsa, Vicente del Bosque, Aimé Jacquet y Pep Guardiola son los técnicos que han marcado a Zinedine Zidane en su carrera hacia el banquillo del Real Madrid.
Zidane sacó su titulación en la escuela francesa. Pero el primer gran legado lo heredó Zidane del italiano Marcelo Lippi, en la Juventus. Allí fue feliz. Del 96 al 2001. Lo ganó casi todo en Italia: Liga, Copa, Supercopa y Copa Intercontinental.
Y Lippi fue su gran valedor desde el banquillo. Y Giovanni Agnelli su presidente. Agnelli le inculcó una afición por los relojes. El 'avvocato' lucía su reloj por encima de la manga de la camisa de su mano izquierda. Y le llamaba siempre a la misma hora, a las seis de la mañana para felicitarle si ganaba el equipo. Daba igual que llegara de viaje de madrugada. El jefe siempre quería hablar con su estrella. Zidane, tras la marcha de Mourinho, dio su veredicto. Su consejo para el Madrid: fichar a Lippi. No pudo ser.
En la Juventus, Zidane no pudo ganar su gran reto: la Champions League. En 2001, fichó por el Real Madrid sólo para eso. Para levantar la Copa de Europa, la de Glasgow con su famoso gol de volea en Hampden Park. Vicente del Bosque logró aunar un equipo asimétrico. Encajó a los galácticos y junto a su amigo Claude Makelele, Zidane pudo conocer la fortaleza de Roberto Carlos en la banda izquierda. De aquello, tomó nota.
Carlo Ancelotti fue un tipo interesante en la formación de Zizou. Al igual que Del Bosque, Ancelotti mostró su sencillez para gestionar grupos con mano izquierda. Fue su segundo durante una temporada, antes de incorporarse como entrenador del Castilla.
Ya en el filial del club madrileño, Zidane bebió en dos fuentes más. Se acercó en diciembre de 2014 a las instalaciones del Olympique de Marsella a ver en directo los entrenamientos de Marcelo Bielsa. No era el primer gran nombre que le visitaba. En Argentina, el argentino ya compartió un asado con Pep Guardiola cuando el ex jugador del FC Barcelona fue a visitarle.
Y en febrero de 2015, Zidane acabó su periplo docente visitando al Bayern de Munich donde vio en directo sesiones de Pep Guardiola. Su presión alta y la posesión fijaron su atención. Zidane se incorpora al Real Madrid con ilusión. En 1998 levantó la Copa del Mundo en París con Aimé Jacquet en el banquillo, un tipo que ganó el campeonato con escaso apoyo de los medios. Otra enseñanza.
Zidane, de chaval, en su barrio de La Castellane en Marsella, alzaba un trofeo de papel de plata cuando ganaba con sus amigos. Ahora, afronta un desafío nuevo y auténtico: ir a por la undécima en Milán, ya de primer entrenador. La Décima la vivió de ayudante.