Magglio Ordóñez estará entre elegibles al Salón de la Fama de 2017
La tendencia a ser más flexible con los exjugadores de las Grandes Ligas que protagonizaron la llamada "era de los esteroides" permitirá ganar terreno a los que piensan que hay que ser menos estrictos a la hora de dar el voto a figuras como Barry Bonds y Rogers Clemens que presuntamente los consumieron.
Lo anterior significa que podrán comenzar a tener más votos que apoyen la posibilidad que lleguen al Salón de la Fama, algo que no va a suceder en la elección que se conocerá este miércoles, para la Clase del 2016.
Lo que si podrá ocurrir es que tanto Bonds como Clemens comiencen a tener ciertas esperanzas de algún día llegar al Salón de la Fama, puerta que hasta ahora parece imposible que pudiesen abrir con los que son partidarios del "purismo" en el deporte de la pelota.
Mientras Ken Griffey Jr tendría garantizada su elección en su primera oportunidad, tal vez con un apoyo sin precedentes, cercano a la unanimidad.
Exjugadores como Mike Piazza, Jeff Bagwell y Tim Raines figuran también entre los otros candidatos con grandes posibilidades de obtener el 75 por ciento necesario.
El motivo de este cambio de inercia es la renovación que se ha dado en la lista de los profesionales de la Asociación de Cronistas del Béisbol de Norteamérica, de la que fueron eliminados unos 100 periodistas que se retiraron hace años.
En estas condiciones, Bonds y Clemens verían incrementado su apoyo por entre cinco y 10 puntos porcentuales, debido a que las nuevas generaciones de profesionales no están tanto por el "purismo" del deporte del béisbol sino darle más valor a las estadísticas.
Luego de recibir aproximadamente el 37 por ciento de los votos el año pasado, se ubicarían cerca del 48 en esta ocasión, de acuerdo a varias fuentes periodísticas.
El pasado julio, la junta directiva del Salón de la Fama redujo el número de votantes de aproximadamente 575 a 475, tras retirar a quienes no habían cubierto informaciones de béisbol durante más de una década.
Mark McGwire, uno de los primeros astros que confesó el consumo de esteroides, no tendrá ya ninguna posibilidad de llegar al Salón de la Fama en lo que es la última aparición, dado que ha ido perdiendo apoyo de forma progresiva.
El excampocorto Alan Trammell, otro debutante en la lista, tampoco se espera que pueda alcanzar el sueño de entrar al Salón de la Fama y mucho menos lo hará el extoletero dominicano Sammy Sosa, otro expelotero salpicado por el posible consumo de esteroides, en lo que será su cuarto intento.
Tras la decisión de la junta, que rechazó una propuesta de la Asociación para que los votantes pudieran seleccionar a un máximo de 12 candidatos en vez de 10, la papeleta del año próximo deparará más decisiones complicadas.
Porque habrá expeloteros de gran valor y aportación al béisbol profesional que entran por primera vez a la lista de los candidatos a ser elegidos.
Los dominicanos Manny Ramírez y Vladimir Guerrero, así como el boricua Iván Rodríguez y el venezolano Magglio Ordóñez estarán entre los elegibles y también algunos de ellos con posibilidades reales de conseguir el gran sueño de entrar al Salón de la Fama.