Copa Confederaciones: ¡Por la Gloria!

La consagración de dos proyectos está en juego. Alemania, esa selección que todos subestimaron por no incluir a la mayoría de los campeones del mundo, está a un partido de silenciar todas las críticas, mientras que Chile también se encuentra a un paso de certificar con un título de ámbito intercontinental todo el avance logrado en años recientes.
Será un duelo entre el último campeón del mundo y el más reciente monarca de América. La final de la Copa Confederaciones Rusia 2017, a jugarse a las 2:00 p. m. en el Krestovsky Stadium de San Petersburgo, paralizará el mundo del fútbol por 90 minutos… o más.
Los chilenos sudaron la gota gorda para acceder a la final, derrotando en los penales a Portugal luego de un duro encuentro que terminó 0-0 tras 120 minutos de dominio de la “Roja”. En cambio, el camino de Alemania hacia San Petersburgo fue mucho menos estresante: goleó 4-1 a México en la semifinal.
Choque de estilos
Germanos y australes igualaron a un tanto por lado en su enfrentamiento de la fase de grupos. Alexis Sánchez había puesto en ventaja a los dirigidos por Juan Antonio Pizzi, pero Lars Stindl firmó el empate justo antes de ir al segundo tiempo. Si bien Chile se hizo cargo del protagonismo y contó con llegadas más claras, decir que le pasó por encima al cuadro de Joachim Low no sería acertado.
“En los últimos días crecimos mucho como equipo. No se puede comparar el partido de mañana (hoy) con el de la primera fase, en el que no jugamos muy bien. Ahora mismo estamos en buenas condiciones físicas, es el último juego de la temporada y no hay nada mejor que irse de vacaciones con un título”, dijo en conferencia de prensa Julian Draxler.
Hoy, el escenario es diferente. Hay una copa en juego, y si bien Chile tiene la presión alta en su ADN y así llegó el tanto de Sánchez en aquel cotejo, también es cierto que el gol del empate alemán también cayó gracias a una descompensación en la defensa chilena luego de ir a presionar demasiado arriba con mucha gente. Pizzi y su sistema defensivo se beneficiarían de mayor atención en ese tipo de jugadas, y está por verse qué hará el seleccionador para ajustar o si sigue la misma idea de “matar o morir”.
“Este equipo siempre crea ocasiones de gol. Ganar sería un broche de oro a un mes muy intenso. Veo muy frescos y con muchas ganas a mis futbolistas. Todos tenemos mucha ilusión de competir con un rival de primerísimo nivel”, señaló Pizzi.
Alemania es un conjunto lleno de futbolistas prácticos, con alta disciplina táctica. Es un equipo solidario a la hora de marcar y cubrir los espacios, con jugadores que ofrecen soluciones en ataque como Draxler, Lars Stindl y, sobre todo, el novel Timo Werner, máximo realizador del torneo junto a su compañero de equipo Leon Goretzka con trío de conquistas.
Los teutones deberán cuidar, además de Alexis, las llegadas por sorpresa de Arturo Vidal y las bandas, con Mauricio Isla por derecha y Jean Beausejeur por izquierda. Los suramericanos, en cambio, deberán referenciar a Werner y vigilar muy de cerca las llegadas por sorpresa de Goretzka, autor de dos goles ante México.
Las cartas están sobre la mesa. Solo uno de los dos equipos puede tener un baño de gloria.
México y Portugal quieren subir al podio
Aztecas y lusos, perdedores en la fase semifinal, se medirán a las 8:00 a. m. en el Otkrytiye Arena de Moscú en el encuentro por el tercer puesto de la Confederaciones. Los europeos no contarán con Cristiano Ronaldo, liberado de la concentración para conocer a sus gemelos recién nacidos.