Venezolanos protestaron 413 veces en agosto, reporta el Ovcs
El Observatorio Venezolano de Conflictividad Social (Ovcs) registró 229 manifestaciones de calle en el mes de agosto en reclamo por los resultados electorales.
En un balance publicado este lunes, afirman que “los picos de manifestaciones ocurrieron el 3, 17 y 28 de agosto (…), exigiendo transparencia electoral y el reconocimiento del candidato Edmundo González como legítimo ganador de las presidenciales (del pasado 28 de julio)”.
El “detonante” de estas acciones, subraya la organización no gubernamental, “fue el anuncio del Consejo Nacional Electoral (CNE), posteriormente ratificado por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), que declaró a (el presidente desde 2013) Nicolás Maduro como vencedor de los comicios”.
“La respuesta gubernamental (a las protestas) se reflejó en las calles, mediante una fuerte presencia policial, militar e incluso de civiles armados, especialmente en aquellos puntos de concentración anunciados por el sector opositor, lo que se interpreta como claro patrón de amedrentamiento y represión que busca acallar la voz de la protesta”, prosigue el escrito, citado por El Nacional.
Asimismo, el OVCS documentó “115 manifestaciones en todo el país”, en las que participaron “mayoritariamente trabajadores de instituciones públicas e integrantes del (partido gobernante) exigiendo el reconocimiento de la reelección” de Nicolás Maduro, que ha sido cuestionada por numerosos países.
Mientras tanto, al menos 22 protestas convocadas o promovidas por la PUD fueron “reprimidas” en nueve de los 23 estados del país.
En términos generales, suman 413 protestas en agosto, de las cuales, nueve de cada 10 estuvieron relacionadas con la defensa de derechos civiles y políticos, mientras que cerca de 50 manifestaciones se debieron a temas recurrentes en el país, como los fallos en los servicios públicos o los bajos salarios y pensiones.
“Los venezolanos continúan manifestando y exigiendo respuestas sobre los resultados de las elecciones presidenciales (…) La persecución contra dirigentes opositores, manifestantes, activistas sociales, defensores de derechos humanos, periodistas y observadores electorales, sumada a la censura digital, creó un ambiente de temor generalizado”, añadió el informe.