Turismo de Táchira en jaque por mala vialidad y falta de gasolina

En el estado Táchira hay lugares dignos de visitar, como la posada Doña Juana, ubicada en La Grita, al norte de ese estado. Sin embargo, este lugar turístico enfrenta desafíos considerables durante esta temporada navideña, por las arduas condiciones en que se encuentran las vías de acceso a la zona y la situación del combustible en la región.
El estado deteriorado de las carreteras y la escasez de combustible han desalentado la llegada de visitantes en estas fechas festivas.
Con capacidad para albergar a más de 80 turistas simultáneamente, la posada recibe apenas entre 10 y 15 visitantes a la semana. A pesar de ofrecer precios asequibles, el costo del combustible se ha convertido en el principal obstáculo para aquellos que desean disfrutar de esta joya escondida, publica La Patilla.
Recientemente, José Gregorio Colmenares, presidente de la Corporación de Turismo del Táchira, lanzó la iniciativa turística "La Caravana Los Andes", destacando vehículos 4x4 que, lamentablemente, no están al alcance de la mayoría de los turistas locales o nacionales.
El funcionario reconoce la necesidad de estos vehículos para enfrentar las desafiantes condiciones de las carreteras tachirenses.
El trayecto desde San Cristóbal hasta La Grita o los pueblos vecinos se asemeja, según algunos, a un viaje lunar, tanto para turistas como para transportadores de productos agrícolas.
La esquivación de cráteres en la carretera se convierte en una tarea ardua, impidiendo a los viajeros apreciar los magníficos paisajes de los páramos andinos, agravado por la crítica escasez de combustible.
María Colmenares, propietaria de un comercio en el Páramo del Zumbador, comparte su preocupación sobre la drástica caída de las ventas en los últimos cuatro meses. Inicialmente atribuido a gastos escolares, la verdadera razón se revela en la dificultad de los visitantes para abastecerse de gasolina, un elemento vital para su desplazamiento.
Aunque el Páramo del Zumbador siempre mantiene un clima frío, los comerciantes señalan que los apagones diarios y prolongados afectan la conservación de los alimentos debido a la falta de refrigeración, añadiendo una capa más de desafíos para sus negocios.
Gerardo y María hacen un llamado unánime a las autoridades para que prioricen la reparación de las vías y ofrezcan soluciones concretas al suministro de combustible. Su esperanza es que estos esfuerzos contribuyan no solo a garantizar empleo para los proveedores de servicios locales, sino también a mostrar las maravillas de los páramos andinos a los turistas, tanto nacionales como internacionales, incluyendo a aquellos provenientes de Colombia.