Médicos del Chiquinquirá atienden en la calle
Indignados por las condiciones en las que deben trabajar y sin capacidad para responder a sus pacientes, médicos y residentes del Hospital Chiquinquirá de Maracaibo decidieron salir la mañana de ayer a la calle y atender las consultas en el estacionamiento.
Como era de esperarse la decisión no caló en el personal directivo, por lo que una orden bastó para que los milicianos que resguardan el hospital retiraran los escritorios e implementos que los doctores utilizaban.
Sin insumos médico, ni aire acondicionado. Sin consultas de ginecología y obtetricia, ni salas de maternidad; sin Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y quirófano operativas. Ese es el balance actual del centro hospitalario.
Nada más que pancartas y consignas les quedaron en las manos a los galenos para comenzar a exigir condiciones óptimas para asumir sus labores. “Tenemos las ganas, no las condiciones. La salud no es un favor, es un derecho”, repetían los doctores ante la mirada de los pacientes que esperaban ser atendidos, cosa que nunca sucedió.
Desde hace un mes los aires acondicionados que funcionan en el área de consultas externas, sala de partos, UCI y quirófano dejaron de funcionar. Desde entonces se dejó de atender a las parturientas, ingresados por la emergencia y por supuesto, cualquier tipo de cirugía mayor.
José Oberto, representante del Colegio de Médicos del Estado Zulia, ginecólogo obstetra, aseguró que la falta de aires acondicionados ha generado que en el hospital exista un gran problema de contaminación.
“Tenemos áreas completamente contaminadas. Se está exponiendo a los pacientes porque en estas condiciones no podemos evitar que contraigan infecciones intrahospitalarias”, advirtió.
Los pacientes salen peor
El remedio es peor que la enfermedad para algunos pacientes que han sido atendidos en el Chiquinquirá. Hania Salazar, presidenta del Colegio de Médicos del estado Zulia, denunció que pacientes que ingresan en muchas ocasiones, luego de ser intervenidos presentan abscesos e infecciones contraídas dentro de la misma institución.
“Todos los centros hospitalarios del Zulia están en las mismas condiciones y es por mala gerencia, porque los directivos se empeñan en ocultar las verdades. La crisis es una cosa y la indolencia es otra”, sentenció Salazar.
La disposición y la experiencia médica está, pero según los residentes del Hospital Chiquinquirá, si tienen una inyectadora, no tienen gazas. No hay forma de responder ante una emergencia. Cuando una mujer en labor de parto llega debe ser referida a otro centro, con el riesgo de que no llegue a tiempo.
Los pacientes se quejan con frecuencia del calor abrasador que hace en las salas de consultas, pues el espacio es reducido y allí deben aguardar médicos, enfermeros y pacientes al mismo tiempo.
El recurso humano es otra de las fallas importantes. En una emergencia en la que deberían laborar unos seis enfermeros, están trabajando solo dos.
“Las autoridades gubernamentales visitan el hospital los días feriados, Día del niño, de las Madres y traen dos canastas de regalos y listo. No se aparecen por aquí en todo el año”, comentaron los residentes.
A los todavía estudiantes de medicina no los mueve una causa política, los mueve su voluntad por el trabajo y la atención a los demás. Pidieron no ser relacionados con ningún bando político, pues sus exigencias no son más que la consecuencia de un abandono progresivo del servicio hospitalario en el Chiquinquirá.