Entrevista con Rafael Ramírez (Parte II): "Estamos conscientes de que aún nos falta mucho"
El escaso presupuesto de Maracaibo es uno de los desafíos a los que se enfrenta el alcalde Rafael Ramírez. Trabajar con solo 118 millones de bolívares, o 24 millones de dólares, para atender las necesidades de casi dos millones de personas de las 18 parroquias de la ciudad, es “completamente insuficiente”.
De ese monto, solo 5 % llega nacionalmente. En entrevista exclusiva para Versión Final, la primera autoridad municipal afirmó que la mayor parte de los recursos son generados por autogestión, gracias a los ciudadanos y empresarios que pagan sus impuestos.
Sin embargo, reconoció que la cifra es muy baja si se compara con una ciudad que llegó a gozar, en sus años mozos, de 600 millones de dólares al año.
“Ahora el presupuesto puede ser mucho menos por la devaluación. (…) Esta era una Alcaldía que manejó $ 600 millones en el tema de la Copa América y hoy tiene la posibilidad de manejar solo $ 24 millones y técnicamente todo es por generación propia”, aseguró Ramírez desde su despacho.
Exaltó así el “aporte” de los maracaiberos, “lo que está haciendo el municipio es generar conciencia de que todos paguemos los tributos que corresponden”.
“No hay una ciudad grande que funcione si la gente no paga impuestos. No porque sea la forma como el gobernante va a lucrarse, sino porque es la única forma de que una ciudad se mantenga”, aseveró el Alcalde.
Una de las líneas durante sus 10 meses de mandato ha sido precisamente esa, la cancelación de gravámenes para convertir a Maracaibo en una ciudad modelo. “Todo el que paga impuestos sabe que lo está viendo en un asfaltado, en el camión de basura que recolectamos, en el árbol que sembramos, en las casas que arreglamos, en las luminarias que colocamos”, argumentó.
"Por supuesto que nos faltan cosas para lograr que la ciudad esté en el primer mundo, en un sitial importante. Pero si no contribuimos entre todos, no tendremos probabilidades de que esto funcione", agregó.
Y, reafirmó, es un compromiso que toda la colectividad debería asumir, “el municipio te quiere ayudar pero ¿cómo te ayuda, si tú no lo ayudas?”.
Ramírez reveló que el porcentaje de personas que se registran como contribuyentes ha venido creciendo un 12 % mensualmente, siendo el impuesto más pagado el del aseo urbano.
“Cuando llegamos, representaba entre 30 y 40 mil bolívares semanales. Ahora está recolectando 1 millón 500 mil bolívares al mes. La gente quiere pagar porque lo ve, sabe que tenemos dificultades en algunos espacios pero se recoge la basura, ya no hay crisis de insalubridad”, dijo.
“La Alcaldía asumió las competencias de Hidrolago”
En otro orden de ideas, el gobernante local conversó sobre las dificultades que aún enfrenta en la atención de los requerimientos cotidianos de la ciudadanía. Admitió que la mayoría de las calles y avenida de la urbe están completamente deterioradas y que las labores de reacondicionamiento, por ahora, están paralizadas.
Recordó que la Alcaldía ejecutaba el plan ALA (Asfaltado, Limpieza y Alumbrado) que, según dijo, benefició a sectores como La Pícola, Pomona y El Pinar, “pero hace unos meses no llega el líquido asfáltico –conocido como A30- que nos permite asfaltar”.
“Sabemos que tenemos 40 pasos conectores que necesitan ser recuperados. Uno de ellos es en la Circunvalación 2, esquina del Palacio de Eventos, saliendo para la Circunvalación 1 por la vía de Los Estanques”, detalló.
“Apenas llegue ese líquido continuaremos con los procesos. No lo tenemos en ningún municipio del Estado, tiene que ver con la atención al Zulia por parte de Pdvsa”, sumó.
En relación a las incontables denuncias por botes de aguas residuales, el Alcalde indicó que le ha tocado dar la cara por la Hidrológica del Lago de Maracaibo (Hidrolago) y asumir trabajos que no le corresponden.
“No estamos trabajando en conjunto con Hidrolago. Está trabajando la Alcaldía en una competencia que no es de ella. (…) Cuando el Alcalde llega a una comunidad, la gente te reclama igual, y cuando están chapoteando aguas negras no podemos decirles: ‘eso no nos compete a nosotros’”, manifestó.
Igualmente, señaló que la municipalidad se ha dado a la tarea de iluminar la ciudad pero “estamos conscientes de que aún nos falta mucho”.
“Iluminamos desde Maczul hasta El Tacón y todas las adyacencias de la Facultad de Ingeniería. Otro espacio que tenía cinco años a oscuras era el tramo desde Plaza para Todos hasta el colegio Thomson. Y así vamos, con la velocidad que podemos debido a los recursos”, expuso Ramírez.
“La atención en todas las parroquias es igual”
Para Rafael Ramírez no hay diferencia entre una parroquia y otra, y mucho menos en la atención a su gente. “Si algo ha hecho esta gestión es estar en el oeste. He ido 16 veces a San Isidro, la parroquia más lejana de Maracaibo”, expresó con firmeza.
“Para nosotros todas las parroquias son iguales, lo que pasa es que en algunas el cambio es un poco más visible que en otras. Las de oeste tienen muchos problemas, atendemos muchos de ellos pero siguen faltando una gran cantidad”, sostuvo.
Rememoró que el primer ALA que hizo la Alcaldía fue en La Rinconada y luego se ejecutó en La Musical, “podemos decir que la cobertura de gestión es en las 18 parroquias”.
Pero los sectores del oeste siguen tan deprimidos que sus habitantes esperan más compromiso para la resolución de sus problemas, algo de lo que está consciente el burgomaestre.
“Tenemos que regresar a la consolidación del oeste y pasa por tres aspectos: movilidad pública, servicios y atención a las necesidades de la comunidad”, especificó.
Dijo que cuando asumió el cargo “no había nada de transporte público”. Hoy, detalló, Maracaibo cuenta con 117 rutas de flotas variadas. “La movilidad es esencial para que cualquier ciudad se desarrolle. Planeamos atenderlos para que estén conectados”, puntualizó.
“Es una forma de dar calidad de vida a la gente”, zanjó.