Enfermeros protestan ante la Defensoría del Pueblo para exigir un salario digno
Ana Rosario Contreras, presidenta del Colegio de Enfermeras de Distrito Capital, quien participó en la protesta, informó que más de 60 % de los enfermeros han renunciado
Un grupo de enfermeros protestaron este martes 9 de febrero frente a la sede de la Defensoría del Pueblo para exigir un sueldo digno y denunciar las condiciones críticas que se vive en los hospitales del país.
"Nos tienen en el hoyo, el salario no alcanza ni para un pollo", es la consigna que gritaban los profesionales frente a la institución.
Ana Rosario Contreras, presidenta del Colegio de Enfermeras de Distrito Capital, quien participó en la protesta, informó que más de 60 % de los enfermeros han renunciado.
"Salario Derecho Humano", se lee en la pancarta que llevaron los trabajadores de la salud a la manifestación.
Por eso estamos aquí, los delegados de los hospitales del área metropolitana de Caracas para decirle a la Defensoría que ya nos cansamos. No vamos a seguir exigiendo en la calle sin que nadie nos preste atención, vamos a ser las actividades que sean necesarias para poder reivindicar el derecho a condiciones salariales eficientes y condiciones de trabajo decentes y seguras porque ya está bueno, la Enfermería de Caracas alza su voz en contra de las condiciones críticas que comprometen nuestras vidas", denunció.
También destacó que a través de la ONG Médicos Unidos, llevan un registro de más de 300 profesionales de la salud fallecidos por Covid-19, entre los que destacan, en palabras de Contreras, una elevada cifra de médicos y enfermeras.
Contreras ha reiterado en diversas oportunidades que la lucha del sector seguirá hasta que mejoren las condiciones generales a la que los enfermeros se exponen constantemente. En diciembre de 2020, expuso que el sector de enfermería cerraba el año en una emergencia humanitaria profunda a punto de catalogarla como una catástrofe.
"En 2018 la enfermería convocó a un paro y esas condiciones se han profundizado, no hay agua, no hay insumos, las camas están disminuyendo, y el personal de enfermería forma parte de movimientos forzosos o migraciones laborales”, comentó Contreras en aquel entonces.