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El Hogar Santa Cruz hace de “tripas corazón” para atender a 75 abuelos desamparados

La hermana María de Ángeles Muñoz aseguró que Venezuela pasa por un contexto social, económico y político con crisis de valores y que los acianos actualmente sobrellevan dos tipos de abandonos

Como un remanso de paz es percibido el Hogar Santa Cruz, un ancianato ubicado al oeste de Maracaibo que beneficia a casi un centenar de abuelos en estado de abandono. Un trabajo de  caridad que se mantiene pese a las adversidades. 

Así lo contó a Versión Final la hermana María de Ángeles Muñoz, quien se mostró emocionada al detallar la loable labor que desarrollan. “Somos las Hermanitas de los Ancianos Desamparados. Nuestro carisma y misión es cuidar a los abuelos desvalidos, solos y pobres”, refirió.

La religiosa detalló que actualmente, bajo el patronato de su fundadora Santa Teresa de Jesús Jornet, albergan a 75 adultos mayores de ambos sexos. Agregó que presentan algunas carencias para la atención de los abuelos.

“Nuestra mayores necesidades son las básicas como los alimentos, implementos de aseo y pañales”, puntualizó Muñoz, mientras realizaba un recorrido al equipo reporteril de Versión Final por las instalaciones, ubicadas en el sector la Rinconada, vía que conduce hacia el Country Club.

Las medicinas para tratamientos y la posibilidad de realizar algunos exámenes, son otras de las penurias que tienen  en el hogar, ya que no  todos los amparados cuentan con el apoyo de sus familiares.

“Generalmente sufren de tensión arterial, diabetes, cáncer, insipiencia cardiaca o venenosa. Algunos deben realizarse diálisis, entre otras, según las patologías”, subrayó la hermana.

El asilo también presenta deterioro en algunas de sus áreas. Aunque luce limpio con jardines verdosos y bien podados.

Hacer de “tripas corazón”

Con una sonrisa en su rostro, sor María de Ángeles precisó que prácticamente les ha tocado hacer de “tripas corazón y de todo un poquito”.  Razón por la que producen parte de lo que consumen. En el ancianato hay  “cochinitos, sembrío de frijol, topocho, cambur, plátano, yuca y todo lo que se pueda cultivar”. También los abuelitos reparan sus vestimentas y realizan pan u otros.

Son cuatro religiosas quienes mantienen el compromiso de cuidar a los adultos mayores junto a un pequeño grupo de voluntarios o empelados. Servicio que ya cuenta con 150 años a nivel mundial.

“Vivimos de la providencia de Dios y de todas las personas que de buen corazón donan y ayudan con su aporte económico o voluntariado”, resaltó la monja, al tiempo que instó a la colectividad a brindar su mano amiga o sumarse al voluntariado.

Muñoz dijo que entre los requisitos para ser ayudante está tener mucha voluntad y deseo de colaborar. “Dependiendo de su tiempo y lo que sepa hacer podría brindar su apoyo”, agregó.

El Hogar Santa Cruz recibe generalmente a los acianos más abandonados, quienes deben cumplir un protocolo para su ingreso.

“Deben ser mayores de 70 años en hombres y 65 años en mujeres. También se les pide un examen médico, rayo X de tórax. Además las personas deben cubrir sus medicamentos e implementos de aseo”, dijo la hermana, en el caso de los abuelos con apoyo familiar.

La religiosa destacó que ellos ayudan a quienes no cuentan con el acompañamiento familiar, son verdaderamente abandonados. “Santa Teresa de Jesús Jornet decía que entre más pobres, más bienhechores”, sumó.

Abuelos abandonados física y emocionalmente

María de Ángeles Muñoz cambió su tono de voz y semblante al lamentar que Venezuela pasa por un contexto social, económico y político con crisis de valores y que los acianos actualmente sobrellevan dos tipos de abandonos.

“Sufren el abandono económico por la situación que afronta Venezuela y el abandono migratorio. Sus familiares se van para otros países y quedan abandonados. Los abuelos quedan faltos de cariño y amor de su familia”, puntualizó.

La hermanita reiteró el llamado a los zulianos a que ayuden a los abuelitos que atienden y que cualquier beneficencia sea llevada hasta sus instalaciones.

“Generalmente hay más alegría en dar que en recibir. Todas las personas que quieran ayudar económicamente puede acercase a las instalaciones y cooperar”, dijo Muñoz.

Para más información pueden comunicarse a los siguientes contactos +58 412-7275703, +58 412-5470157 y al +58 424-3713364.

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