De manos atadas ante el síndrome de Guillain-Barré
Una fiebre muy elevada, dolores corporales, hinchazón y erupción en la piel alertaron a Yelitza Oberto sobre un nuevo virus al que le llaman zika. Parecía un malestar que no salía de lo común con respecto a las enfermedades comunes que se han registrado en la ciudad. La semana transcurrió, pero cada día empeoraba: la fiebre continuaba, los dolores agravaban, e incluso llegaron a recluirla en un hospital.
Desde el 31 de diciembre se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital Universitario de Maracaibo, según cuenta su hijo David Chávez. La situación es delicada, le dicen los médicos; el virus que había en su cuerpo activó y aceleró un síndrome que ataca parte de su sistema nervioso, por error.
En el piso cuatro, de la UCI, se encuentra Yelitza con sus miembros inferiores y superiores paralizados. El diagnóstico oficial: Síndrome de Guillain-Barré, dicen los médicos que la supervisan. El tratamiento funcionaría, pero la Inmunoglobulina, medicamento ideal para tratarla, es difícil de hallar, así como los otros dos complementarios del régimen médico.
“Estamos de manos atadas”, comentó David. Afirmó que “la mejoría ha sido muy lenta y sobre la enfermedad no hablan mucho, es un total hermetismo”. En la UCI, junto con su madre, aseveró que existen tres casos para los que el tratamiento es el mismo pero que no a todos les está funcionando. “En el caso de mi mamá se volvió hipertensa”, declaró.
Diariamente, recorre parte de la ciudad buscando los medicamentos que requiere su madre para su recuperación. Se mantiene al pie de la cama esperando con fe que se recupere prontamente, aunque comentó que persiste una discusión entre los médicos sobre el diagnóstico.
Este lunes, los médicos del Hospital Universitario de Maracaibo se reunieron como acostumbran para tratar los casos críticos del centro asistencial y, según explicó David, “hay unos médicos que dicen que no se trata del síndrome, creen que es otra enfermedad, pero no logran especificar cuál”.
Especialista
El doctor Carlos Chávez, neurólogo y genetista, profesor del postgrado de neurología del Hospital Universitario de Maracaibo, confirmó la existencia de casos del síndrome en el centro asistencial.
Explicó que “se trata de una polineuropatía donde ocurre un proceso inflamatorio que lesiona el nervio. Esto ocurre cuando alguien se enferma de algún virus, en este caso hay sospecha de zika pues aún no se confirma; clínicamente los pacientes tienen síntomas de este virus: fiebre, dolor de cabeza, erupción, conjuntivitis, diarrea y unos días posteriores, entre los 5 y 13 días del malestar, el paciente presenta debilidad generalizada, debilidad causada por la lesión del nervio”.
“Hay pacientes que pueden acudir con cuadros de cuadriplejía”, parálisis cerebral que afecta la psicomotricidad, sostuvo el Chávez.
“El virus cuando se instala en el organismo hace que el organismo produzca anticuerpos, para que se defienda lo que forma parte de la inmunidad, esa inmunidad queda con una memoria y sigue produciendo anticuerpos, el organismo reconoce como extraño la mielina que recubre los nervios”, reveló el doctor.
De forma sencilla podría decirse que la mielina es como el plástico que recubre los cables y al no estar presente este material aislante se podría producir un cortocircuito, así explicó el neurólogo. “Los anticuerpos van hacia el nervio y lo atacan y provocan un proceso que se llama desmielinización, en la cual se le quita la cobertura de mielina al nervio y este no puede transmitir el impulso nervioso”, enfatizó Chávez.
Este proceso rápido que provoca la paralización se puede desarrollar en 24 horas, afirmó, y añadió que “una de las preocupaciones es que la paralización no solo afecta el músculo esquelético, también puede afectar los músculos respiratorios y causar una parálisis respiratoria”. La desmielinización o proceso inflamatorio puede durar hasta 15 días desde su aparición, destacó el neurólogo.
“Para corroborar la existencia del síndrome se realiza una electromiografía, para detectar una lesión nerviosa e indicar que hay presencia de una polineuropatía”.
Diagnóstico
La secuela es que el paciente va a tener debilidad generalizada, pérdida de los reflejos, los cuales no se recuperan nunca. Deben ir a rehabilitación para recuperar la fuerza muscular hasta cierto punto. Hay pacientes que se recuperan bien pero algunos tienden a quedar en silla de ruedas, debido a que la lesión del nervio es muy acentuada, precisó el doctor.
La mortalidad del síndrome podría variar de acuerdo a las complicaciones, generalmente las muertes se asocian a parálisis respiratorias, explicó el neurólogo que al cumplir el tratamiento a tiempo el síndrome no llega a ser mortal.
“Quizás el mayor problema que estamos enfrentando ahorita, apartando que esto es una complicación por una infección viral, es que no hay tratamientos. El tratamiento esencial son las Inmunoglobulinas y no se consiguen”, subrayó Chávez.