Rodrigo Méndez // Gracias por enseñarme a amar

Me enseñan a vivir,
Cada día, me dan dosis de sentir, es cariño sublime, es llorar, es cantar, es agradar a Dios, decirle que le amas primero, y suplica su bendición y alegría de reír.
Amar es un túnel, avanzando aprendí a conocer, y es así que conozco la verdad, solo amamos cuando marchamos.
Así cómo el rocío nutre, también nos muestra la confusión, pues vemos los colores de la vida, cuando estamos alejados.
Así es amar, es incondicional, cuando la soledad, nos acecha también nos habla, nos dice que la luz está allí, que siempre estuvo y no pudimos mirar.
Cuando avanza la vida, nos trae recuerdos, como otro punto de partida, como un renacer, volver a estar allí, volver a llorar, a reír, a cantar, regresar a la senda enseñarme a vivir, con esa dosis de sentir que cada día me dan.