Marcy Avila, la influencer que representa a la comunidad LGBT venezolana

El 5 de febrero de 1997, la familia Avila, con alegría, recibió a un nuevo integrante al que llamaron Marcel. 13 años después el niño descubrió que no se sentía a gusto con los cambios que le había traído la pubertad y fue así como empezó a ver la vida de otra forma. Hoy es conocido como Marcy una influencer venezolana que representa a la comunidad de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Transgénero (LGBT) en Venezuela.
Esta joven caraqueña es el reflejo de un grupo minoritario que hoy, 28 de junio, celebra el Día Internacional del Orgullo LGBT y que trabaja para reivindicar su puesto en la sociedad venezolana, esa que culturalmente no ha evolucionado en comparación con otros países. Un factor social que limitó el proceso de transición de la youtuber transgénero.
@marcy, como es conocida en las redes sociales, cuenta a Versión Final cómo su infancia y adolescencia estuvo cargada de emociones y momentos decisivos que la llevaron a lo que es hoy.
Yo jugaba con carritos porque era lo que me gustaba, si me ponían algo con dos ruedas y unas máquinas para planchar o una cocinita, obviamente me iba a ir por los automóviles que eran mucho más divertidos. Al final del día eso no definía ni concretaba la sexualidad”, recuerda la joven de su niñez.
Tiempo después, a sus 13 años, empezó a notar cambios que no iban con su sentir y la hicieron “chocar con la realidad” que iniciaba a vivir. Aparentar ser lo que no era, vivir su vida en “tercera persona”.
Al empezar a crecer comencé a ver cambios en la pubertad y fue cuando me pegó esta realidad. ‘Se me está poniendo gruesa la voz, eso no me está gustando, ¿Qué está pasando, porqué me siento tan mal con mi cuerpo?, fueron algunas de los cuestionamientos que Marcy asegura haberse hecho en la época.
“Pubertad, el peor momento de un transgénero”
Para la también ingeniera de sonido, “la pubertad es el peor momento de la vida de una persona transgénero” por ser el periodo en el que se descubre “lo que deseas ser en la vida”. Además, que es el tiempo donde se empieza a ocultar los sentimientos ante la familia.
Un día me dije que era imposible que fuera la única persona que se sintiera así. Indagué en internet y vi que habían personas que hacían modificaciones en su cuerpo para cambiar de sexo y afirmé que necesitaba eso”, remora.
Aunque no se rebeló en el momento, Marcy empezó a descubrirse como persona y fue así como en 2016, a sus 19 años, le llegó el momento adecuado para dar a conocer lo que sentía.
Quien era en ese entonces un chico seguro que no “demostraba ser nada LGTB” había decidió irse a Rumania con su novia y aprovechó la oportunidad para contarle a sus allegados lo que pensaba.
Me crié con una familia extremadamente homofóbica, transfóbica y obviamente tenía demasiado miedo que me botaran de la casa o me agarraran a golpes, una realidad de la cultura del venezolano que crea ideologías con las que se crecen”, reconoce.
Su familia no lo tomó de la forma que Avila lo imaginaba. Pudo irse del país y al terminar la relación con su novia volvió a Venezuela, tiempo donde iniciaron sus verdaderos problemas.
Hormonas, “tratamiento inexistente en Venezuela”
Desde ese año empezó a dejar crecer su cabello y para 2019 dio un paso seguro a su transformación. Marcy inició el proceso de tratamiento de hormonas que le ha permitido hasta la actualidad ser reconocida por los extraños como una chica.
Mi caso es muy particular porque soy lesbiana yo nunca he salido con un hombre ni tampoco he sufrido una violación o algún tipo de abuso sexual, cosa que la gente suele pensar cuando una persona es trans o gay”, manifiesta la joven, quien asegura que este comportamiento en cuanto a la preferencia sexual es denominado ‘disforia de género’.
Antes de iniciar este proceso ella hacía videos para YouTube y sus seguidores querían a ese chico “seguro y extrovertido” que no se veía físicamente “nada mal”. Sin embargo, se sentía deprimida y con una autoestima bajo, razón por la que en diciembre del año pasado empezó a traer medicamentos desde Colombia. “Un tratamiento hormonal que en Venezuela es inexistente”.
Es algo que la mayoría de los trans venezolanos no pueden hacer. Aquí las chicas trans toman son pastillas anticonceptivas que de hecho no son la ideal, porque los cambios son menores. Además, tienen muchos efectos secundarios como dolor de cabeza, mareo, nauseas y otros síntomas”, revela.
Según Avila este tipo de medicamentos no es lo único difícil de adquirir en el país. Ser diagnosticado y tratado por un especialista es otra de las complicaciones que el colectivo LGBT puede encontrar.
El caso médico es algo súper difícil. Solo recuerdo un psicólogo que diagnostica a chicas trans llamado Luis Madrid, quien puede orientar a las personas LGBT (...) En cuanto al tratamiento hormonal debe ser manejado con un endocrino, pero en el país no hay este tipo de especialistas que manejen el tema”, detalla Avila.
Refiere que ante la carencia de profesionales especializados, a las personas que quieren cambiar su apariencia les toca automedicarse. “Algo que está muy mal porque uno debe llevar un control para ver cómo están los niveles debido a que el tratamiento hormonal tiene sus riesgos. Entre ellos la trombosis”, añade.
Gasta hasta $ 400 en tratamiento
La joven puede gastar en un mes entre 30 y 400 dólares en tratamiento y traslado, de acuerdo al sitio donde lo compre y el medicamento que le sea recetado.
En cuanto a los cambios físicos, asegura que “se han visto poquito a poco” y que dependen de la genética y la edad en que la persona inicia el tratamiento. También especifica que las transiciones “son mejores antes de la pubertad debido a que “no hay cambio y error, como es el caso de la voz”.
En mi caso empecé a ver cambios en mi piel, se puso más suave, los vellos se hicieron más delgados y las facciones de la cara cambiaron muchísimo. Quizás como me veo en el espejo cada día no veo cambios tan radicales, pero las personas en la calle me tratan como chica. Es un súper avance las cosas que se logran con solo el tratamiento hormonal”, ratifica.
Transgénero sinónimo de prostitución
Gracias a los trabajos que desempeña la caraqueña, que van desde actriz a músico, ha logrado costear sus medicamentos. Una realidad que para muchas chicas trans venezolanas es totalmente diferente.
En Venezuela, ser transgénero es sinónimo de trabajadora sexual pero lo que muchos no saben es que adquieren esta labor para lograr cubrir los gastos que implica tener otra apariencia.
Ante el costo que puede generar el proceso en Venezuela, lamentablemente, hay muchas chicas trans que caen en la prostitución. Tengo amigas que se han ido a Colombia y han entrado al negocio”, manifiesta.
La transgénero caraqueña asegura que esta situación ocurre por dos cosas puntuales; “principalmente porque hay mucha discriminación para conseguir un trabajo normal y segundo porque es dinero rápido”.
Cambio de sexo ronda los 40 mil dólares
El cambio de los órganos sexuales es la meta final de algunos transgéneros que pasarían a ser transexuales. Pero para Marcy Avila este procedimiento no se debe pensar a ligera. “La cuestión con el cambio de sexo es que es una cirugía sumamente delicada y costosa”, argumenta.
Avila detalla que la intervención en Estados Unidos ronda alrededor de los cuarenta mil dólares con los “doctores más reconocidos”. Añade que en Venezuela hay médicos que realizan la operación “pero no son personas totalmente experimentadas en el tema y los resultados no valen la pena”. Sin embargo, pueden cobrar unos $ 10 mil.
Es necesario que sea un especialista quien realice la operación por el tema de la sensibilidad, funcionalidad. Así como la adaptación ante las relaciones sexuales y otros puntos a considerar”, sugiere.
Luego de ser intervenido quirúrgicamente viene el proceso de recuperación que según Avila puede durar aproximadamente un año.
El intervenido deberá usar un dilatador, un objeto similar al dildo, colocarlo en la ahora vagina y dejarlo cada cierto tiempo para que no se cierre, es como una especie de zarcillo si te lo dejas de poner se cierra”, especifica la youtuber.
Nueva aparecía sin documentos legales
Aunque Marcel es ahora reconocido como una chica, sus batallas no solo han sido enfrentarse al qué pensará su familia y la sociedad. Ser una venezolana legal es otra de sus metas.
En el hecho social estamos muy mal. Al empezar porque no podemos cambiar el nombre y por tanto actualizar nuestros papeles. Somos el único país de Latinoamérica donde este proceso no se puede”, enfatiza la caraqueña, quien destaca que el ‘derecho a la identidad es sumamente importante’”, enfatiza.
Avila asevera que “el matrimonio igualitario es algo imposible en el país por ser ilegal”. Un factor que genera muchas desventajas para quienes tienen parejas extranjeras y desean irse a vivir con ellos.
Otra de las limitaciones que expresa Marcy es el poder encontrar un trabajo debido a que las personas suelen discriminar por ser una persona trans sin saber su potencial y los conocimientos.
Imaginen que me vea súper femenina y que a nadie se le pase por la cabeza que nací siendo hombre y voy a un trabajo donde debo entregar documentos con datos masculinos, eso generará discriminación al primer el instante”, considera.
Nominada como artista digital
Pese al proceso que ha vivido la joven, sus habilidades profesionales la han hecho destacar en medios digitales donde cuenta con 40 mil seguidores en Instagram y unos 28.600 suscriptores en YouTube. Canal que pausó desde que inició su transición pero que espera retomar pronto.
Avila además está nominada este año como Artista Digital en los Premios Pepsi Music. Las votaciones estarán habilitadas hasta el 9 de agosto.
Desde sus plataformas, Avila busca que las personas normalicen el tema de ser transgénero “porque realmente no tiene nada de malo”. Otro de sus objetivos es sacar de la mente de los venezolanos que no todas las trans son prostitutas y que tampoco deben ser peluqueras. “Simplemente podemos hacer mucho más que eso”, dice.
Hoy, su familia la acepta tal como es y aunque ya no hay tantos problemas como antes, la llaman Marcel, algo que reconoce que no le molesta.
Desde que los cambios se han hecho visibles me siento mucho mejor, tengo más seguridad y mis seguidores me han comentado que me veo más feliz. Tengo más motivación en mi vida”, puntualiza al referir que si logra terminar su transformación su nivel de confianza sería ‘muchísimo mejor, muy diferente a como era antes’.
Abecedario LGBT
“Marico”, “mujercita”, “mariposón”, “parcho”, “cachapera”, “marimacho”,“raro”, “extraterrestre” son algunos de los términos ofensivos que habitualmente se escuchan en Venezuela. Palabras que descalifican al colectivo LGTB y que fueron sustituidas por el lenguaje inclusivo.
Muchos de ellos aun no son aceptados por la Real Academia de la Lengua Española (RAE) pero si recomendados por la Federación Estadal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales (Felgtb).
- Agénero: Persona sin género y que no se identifica con ninguno.
- Asexual: Persona que no se siente atraída sexualmente por ningún otro sexo.
- Bifobia: Aversión a la sexualidad o a las personas bisexuales, a quienes lo parecen o defienden.
- Binarismo de género: Hace referencia a las formas tradicionales, llamadas también binarias, de género: hombre y mujer.
- Bisexual: Orientación sexual de quienes sienten atracción romántica, afectiva y/o sexual por más de un género, sea el suyo propio o diferente.
- Cisgénero: Persona cuyo género coincide con su sexo biológico asignado al nacer.
- Cisheteropatriarcado: Referente a la organización social en la que sólo prevalece el criterio del hombre y siempre que sea heterosexual y cisgénero.
- Cisheteronormatividad: Conjunto de creencias e ideas asimiladas a lo heterosexual y cisgénero, cuyo arraigo produce un tipo de opresión sobre estos colectivos.
- Demisexualidad: Persona que solo se siente atraída por aquellos con quienes previamente ha establecido vínculos emocionales.
- Disforia de género: Término médico que describe la discrepancia de una persona con el sexo/género asignado al nacer.
- Drag King: Mujer que se viste y maquilla como hombre, con intenciones cómicas, satíricas o dramáticas para actuar en espectáculos.
- Drag Queen: Hombre que se viste y maquilla de mujer, con intenciones cómicas, satíricas o dramáticas para actuar en espectáculos.
- Expresión de género: Representación física del género, que puede o no coincidir con la identidad de género.
- Gay: Hombre que siente atracción sexual y afectiva por personas de su mismo sexo.
- Género: Conjunto de características de origen cultural relativas a patrones de comportamiento y de identidad sobre la base de las cuales se establecen socialmente la distinción entre hombres y mujeres.
- Género fluido: Persona que no se identifica con una única identidad de género, sino que va fluyendo entre ellas.
- Género no binario o genderqueer: Término que engloba a todas aquellas identidades de género que van más allá de hombre o mujer; también llamada Cisnormatividad.
- Heterosexual: Persona que siente atracción sexual y afectiva por individuos del otro sexo.
- Homoparentalidad (Homomaternidad-Homopaternidad): Relación existente entre dos madres lesbianas o dos padres gais y sus hijos e hijas derivada de la relación jurídica que comporta la filiación.
- Homosexual: Persona que se siente atraída por el mismo sexo.
- Homofobia: Aversión a la homosexualidad o a las personas homosexuales, a quienes lo parecen o las defienden.
- Identidad de género: Hace referencia a la percepción que un sujeto tiene sobre su propio género, sin tener en cuenta cuál es su sexo biológico.
- Intersexual: Que presenta características físicas de ambos sexos, masculino y femenino.