Leonardo Soto a VF: “El proyecto de Chávez fue la supresión empresarial”

Leonardo Soto, economista, miembro de la Unión Empresarial del Comercio y los Servicios del Estado Zulia (UCEZ) y asesor en negocios de gobierno para América Latina, conversó con Versión Final sobre cómo se degeneró la percepción productiva de Venezuela. El experto dijo que el proyecto del expresidente fallecido Hugo Chávez tenía como objetivo la supresión progresiva del empresariado privado.
—La pregunta del millón de dólares, ¿Cómo se reactiva la economía en tiempos de crisis política?
—Para reactivar la economía no hace falta una Asamblea Nacional Constituyente, desde el punto de vista de político-económico, primero se debe liberar progresivamente el tipo de cambio y reactivar la inversión. Actualmente, no hay confianza en las políticas cambiarias. Por consiguiente, es necesario hacer un llamado al sector empresarial sin distingo, sin discriminación, hay que buscar una conciliación empresarial y dotar de insumos y seguridad a la industria.
Por otro lado, se debe disminuir el acoso de contribuciones especiales que están afectando los costos de las empresas. La realidad venezolana es complicada, toda decisión política afecta a cualquier situación económica en el país, ha habido malversación de fondos por parte del Estado y esto ha ocasionado que todo implosione. Estamos viendo las consecuencias de un despilfarro de un barril de petróleo a $ 100. Se pensó que el petróleo no iba a bajar. Lo único que ha hecho el Gobierno es radicalizar su proceso para estar más tiempo en el poder.
—Varios economistas responsabilizan al expresidente Chávez de la crisis económica que hoy vivimos ¿Es cierto o falso?
—El proyecto de Chávez fue la supresión progresiva del sector empresarial privado, él consideró que el empresariado privado no era conveniente en su sistema de Gobierno, por eso, creó medidas para vigilar ese sector, creó las propiedades compartidas, mixtas y de propiedad social. En la era Chávez se degeneró la percepción del ideal productivo, su idea no tuvo una base operativa, nunca se probó que las empresas estuvieran en capacidad para producir. Todo fue una intención, así como el plan de la patria tiene la intención pero están orientados a derrumbar y deshacer lo que fue la economía productiva y crear un modelo nuevo, a partir de algo que ellos no tienen claro.
—¿El CLAP es la solución a los problemas de desabastecimiento alimentario?
—Los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP) son una estrategia de salvamento para las personas de mayor vulnerabilidad, desde el punto de vista de la capacidad de compra. El CLAP fue creado para los que no pueden tener acceso a los productos, pero como estrategia permanente hace dependiente a las familias y no hay divisas su cientes para entregar todas esas cajas con alimentos. Es un error económico que traerá problemas al país porque no genera producción su ciente. El Estado los presenta para crear una situación de aparente estabilidad y de completa paz, pero la realidad es todo lo contrario, hay grandes niveles de desabastecimiento en todo el país.
—¿En qué condiciones se encuentra el aparato productivo nacional?
— El empresario venezolano es digno de admiración, porque a pesar de los ataques sigue en pie. La capacidad de producción está en un 22%. Para solucionar esto tiene que haber un compromiso sincero entre el Gobierno y las empresas, dentro del Ejecutivo hay personas preparadas que deben entender que hay cosas que no son apropiadas. Venezuela no volverá a lo que antes fue.
Dependimos mucho de la renta petrolera, el Gobierno comprometió a toda una generación. Si ellos abandonaran el poder el día de mañana o si rectificaran su política, los precios de Venezuela pudieran estabilizarse en dos años, su enfoque productivo pudiera cambiar entre siete y 10 años.
—¿Los empresarios están acaparando la producción?
—El empresario no es acaparador, debemos entender que la administración nacional es supervisada por el Gobierno desde la entrada de materia prima hasta la salida del producto terminado. Es un elemento de disociación mediático, todo lo que se vive es la consecuencia de las expropiaciones, del control de cambio y de la inseguridad jurídica. El empresariado trata de proteger su capital y mantener sus puestos de trabajo. Es el Estado quien monta un show mediático pero todo es consecuencia de las medidas económicas no acertadas.