Fiscalía recupera cuerpos de ocho líderes sociales asesinados por disidencias de las Farc en Colombia
De acuerdo con la investigación, dos de las víctimas fueron llamadas el pasado 4 de abril a presentarse ante ese grupo armado, y tres días después también fueron citadas las seis restantes para ser “interrogadas” sobre una supuesta intención de formar o colaborar con una célula del ELN en la región. La Fiscalía señaló que, días después, las ocho personas habrían sido llevadas a un predio abandonado, donde finalmente fueron ultimadas
Con apoyo de la Fuerza de Despliegue Rápido #11 del Ejército Nacional, la Fiscalía General de Colombia confirmó la recuperación de los cuerpos de ocho líderes sociales y religiosos que fueron hallados en una fosa común en una zona rural de Calamar, en el departamento de Guaviare, al sur del país.
Según los reportes iniciales, las víctimas fueron identificadas preliminarmente por sus familiares como Jesús Valero, Carlos Valero, Marivel Silva, Isaid Gómez, Maryuri Hernández, Óscar Hernández, James Caicedo y Nixon Peñaloza Chacón. Todos habían sido reportados como desaparecidos desde principios de abril, informa la Fiscalía a través de un comunicado de prensa.
El hallazgo se dio como resultado de la activación de mecanismos de búsqueda urgente tras la denuncia de que estas personas habían sido citadas por integrantes del frente primero "Armando Ríos" de las disidencias de las Farc.
De acuerdo con la investigación, el 4 de abril dos de las víctimas fueron llamadas a presentarse ante ese grupo armado, y tres días después también fueron citadas las seis restantes para ser “interrogadas” sobre una supuesta intención de formar o colaborar con una célula del ELN en la región.
La Fiscalía señaló que, días después, las ocho personas habrían sido llevadas a un predio abandonado, donde finalmente fueron asesinadas. Las pesquisas apuntan a que los victimarios actuaron por órdenes directas del círculo de confianza de alias Iván Mordisco, cabecilla de las disidencias, como una medida de control territorial ante la posible incursión de grupos rivales.
Las autoridades continúan con los trabajos forenses y las investigaciones judiciales para esclarecer completamente lo ocurrido y judicializar a los responsables. El caso ha generado una fuerte reacción de rechazo por parte de organizaciones defensoras de derechos humanos y sectores sociales del país.