Obama reaparece con una dura advertencia sobre el rumbo democrático de EE.UU
Durante un evento cívico, el expresidente alertó sobre el debilitamiento de los valores democráticos en Estados Unidos. En una crítica velada al liderazgo de Donald Trump. Subrayó el peligro de que el país adopte prácticas propias de gobiernos autocráticos
En un momento de alta tensión política y social, el expresidente Barack Obama reapareció públicamente este martes 17 por la noche en Hartford, Connecticut, para expresar su preocupación por el rumbo de la democracia en Estados Unidos.
Durante una conversación con la historiadora Heather Cox Richardson ante un grupo cívico, Obama alertó que el país está "peligrosamente cerca" de permitir que sus líderes actúen de manera similar a los gobiernos "autocráticos". Si bien no mencionó directamente al presidente Donald Trump, sus comentarios representaron una crítica velada al actual panorama político federal.
De acuerdo con el diario The New York Times, el exmandatario lamentó el debilitamiento de pilares democráticos fundamentales como el Estado de derecho, la libertad de prensa, la independencia del poder judicial y el derecho a la protesta.
Quienes lideran hoy desde el gobierno federal muestran un compromiso débil con los principios que han sustentado nuestra democracia desde la Segunda Guerra Mundial”, advirtió.
Obama habló con su estilo característico, mesurado pero firme, y pidió a los ciudadanos mantenerse vigilantes ante los signos de "erosión institucional y democrática".
La democracia, dijo Obama, exige que funcionarios, jueces y abogados del Departamento de Justicia defiendan la Constitución y cumplan la ley.
“Requiere que se tomen en serio ese juramento, y cuando eso no ocurre empezamos a derivar hacia algo que no es coherente con la democracia estadounidense”, dijo. “Es coherente con las autocracias. Es coherente con la Hungría de Orbán”.
Y prosiguió: “Todavía no hemos llegado a eso del todo, pero creo que estamos "peligrosamente" cerca de normalizar un comportamiento así. Y necesitamos gente, tanto fuera del gobierno como dentro de él, que diga: ‘No vayamos a ese precipicio, porque es difícil recuperarse’”.
Sin embargo, en un momento en que el país se enfrenta a "protestas, violencia política y la posibilidad de entrar en otra guerra en el extranjero", Obama limitó sus comentarios a críticas veladas y reflexiones de catedrático.
En lugar de ello, Obama animó a otras personas en particular a quienes están en bufetes de abogados, universidades y empresas a alzar la voz en contra de las exigencias del gobierno de Trump. Obama reconoce que es poco probable que él influya en los republicanos o en el propio Trump con alguna crítica pública, por lo que se ha enfocado en asuntos en los que sus palabras pueden tener algún efecto, según personas que trabajan con él. En abril, también pidió a universidades y bufetes de abogados que se resistieran a la intimidación del gobierno de Trump.
El martes por la noche, ofreció una crítica especialmente mordaz a los liberales acomodados ante el público de Connecticut, un estado demócrata acaudalado.
Durante su presidencia, los liberales se sentían “cómodos en su rectitud”, dijo, porque no se ponía a prueba.