Irán amenaza con atacar bases militares y barcos de países aliados de Israel
“Cualquier país que participe en repeler los ataques iraníes contra Israel será objetivo de ataques contra todas las bases regionales del gobierno cómplice, incluidas las instalaciones militares en los países del Golfo Pérsico y los barcos de guerra en esa zona y en el mar Rojo”, advirtieron las autoridades desde Teherán
Teherán advirtió este sábado que atacará bases militares y embarcaciones en la región pertenecientes a países que colaboren con Israel para repeler los ataques lanzados por Irán, en medio de una creciente escalada bélica desatada tras los bombardeos israelíes del viernes contra territorio iraní.
Cualquier país que participe en repeler los ataques iraníes contra Israel será objetivo de ataques contra todas las bases regionales del gobierno cómplice, incluidas las instalaciones militares en los países del Golfo Pérsico y los barcos de guerra en esa zona y en el mar Rojo”, señaló un comunicado del gobierno iraní, citado por la agencia estatal Mehr. La advertencia menciona directamente a Estados Unidos, Reino Unido y Francia.
Un funcionario citado por la agencia Fars advirtió que los ataques podrían extenderse a bases militares estadounidenses en los próximos días.
La respuesta iraní fue desencadenada por un ataque aéreo israelí que impactó infraestructura crítica en Irán, incluidos objetivos militares, edificios gubernamentales e instalaciones nucleares. Según fuentes oficiales, los sistemas de defensa aérea de Estados Unidos y al menos un destructor desplegado en la región contribuyeron a interceptar misiles iraníes en su trayecto hacia territorio israelí, reporta El Mundo de España.
Aunque inicialmente Washington afirmó que Israel había actuado de forma unilateral y comenzó a evacuar parte de su personal diplomático en Oriente Medio, este sábado revirtió su postura al reubicar recursos militares, incluidos dos destructores en el Mediterráneo oriental, en previsión de un posible contraataque de Irán.
Cientos de muertos y daños en infraestructuras clave
Los ataques israelíes dejaron un saldo de más de 100 muertos en Irán, la mayoría civiles. La televisión estatal mostró imágenes de un edificio residencial de 14 pisos completamente destruido en Teherán, donde murieron al menos 60 personas, entre ellas 20 niños. Otro ataque en la provincia de Hamdan causó dos muertos y cinco heridos.
La agencia estatal iraní también confirmó la muerte de dos subcomandantes del ejército, Gholamreza Mehrabi y Mehdi Rabbani, aunque no se precisaron las circunstancias. El Estado Mayor iraní declaró que las operaciones continuarán “hasta que el régimen sionista criminal se arrepienta de sus acciones”.
Los bombardeos israelíes también acabaron con la vida de al menos 20 altos mandos de las fuerzas armadas, incluidos miembros de la influyente Guardia Revolucionaria. En respuesta, el líder supremo, el ayatolá Alí Jamenei, nombró nuevos comandantes con larga trayectoria en esa unidad de élite.
Ataques a bases y plantas nucleares
Según fuentes de defensa, el objetivo inicial de la ofensiva israelí fue desarticular el sistema de defensa aérea iraní y golpear el mando militar. En la provincia de Kermanshah, se reportaron bombardeos sobre una base de misiles, así como ataques directos a radares, lanzadores y unidades que protegían la planta nuclear de Fordo, una de las más protegidas del país, donde Irán enriquece uranio hasta un 60 %, cerca del umbral para uso militar.
El portavoz de la organización iraní de energía atómica, Behrouz Kamalvandi, reconoció “daños limitados” en Fordo, pero aseguró que parte del equipo ya había sido reubicado y que no existe riesgo de contaminación.
En la planta de Natanz, en la provincia central de Isfahán, también se confirmaron ataques. La OIEA (Organismo Internacional de Energía Atómica) informó de daños en la red eléctrica y posibles afectaciones a las centrifugadoras, además de haber detectado fugas de radiactividad que, por ahora, no representan un peligro para la población.
La tarde del sábado, Israel amplió su ofensiva con un ataque aéreo sobre South Pars, la mayor instalación de gas natural de Irán. El ataque, según la agencia Fars, fue ejecutado con un pequeño dron y provocó un incendio aún no controlado por los bomberos.
La comunidad internacional observa con creciente preocupación esta nueva fase del conflicto, que amenaza con arrastrar a otras potencias regionales e internacionales a un enfrentamiento directo.