Colombia defiende asistencia de su embajador en juramentación de Maduro: “No significa reconocimiento”
Para el jefe de la diplomacia del vecino país, la decisión de enviar Rengifo a la investidura de Maduro fue el resultado de una evaluación “prudente”. Destacó que la reanudación de las relaciones con Venezuela, tras años de ruptura, ha tenido impactos positivos en la economía y la seguridad de las regiones fronterizas.
El canciller de Colombia, Luis Gilberto Murillo, defendió este lunes la presencia del embajador Milton Rengifo en la toma de posesión de Nicolás Maduro el 10 de enero, asegurando que no implica un reconocimiento a los resultados del 28 de julio y mucho menos al Gobierno venezolano.
En entrevista con BluRadio, Murillo reafirmó que su país “no reconoce los resultados en Venezuela porque, sin actas públicas y transparentes, no podemos avalar ese proceso”. Sin embargo, resaltó la importancia de mantener canales de comunicación por la dinámica fronteriza, reseñó Blu Radio
Para el jefe de la diplomacia del vecino país, la decisión de enviar Rengifo a la investidura de Maduro fue el resultado de una evaluación “prudente” en la que tomaron en cuenta factores “históricos y geopolíticos”.
"Colombia no reconoce los resultados en Venezuela porque, sin actas públicas y transparentes, no podemos avalar ese proceso", afirmó Murillo. No obstante, el canciller subrayó la importancia de mantener canales de comunicación abiertos entre ambos países debido a la compleja dinámica fronteriza, que abarca temas de seguridad, comercio y relaciones humanitarias.
El diplomático también destacó que la reanudación de las relaciones con Venezuela, tras años de ruptura, ha tenido impactos positivos en la economía y la seguridad de las regiones fronterizas.
Desde la reapertura, el comercio bilateral ha crecido, pasando de cero a más de $1.200 millones de dólares en intercambio comercial. Además, se ha registrado una notable disminución en las tasas de homicidio en Cúcuta y su área metropolitana", agregó.
Otro punto clave que mencionó el canciller fue el papel de la frontera en el proceso de paz en Colombia. Murillo recordó que en estas regiones actúan grupos armados ilegales, cuya dinámica influye directamente en las negociaciones de paz que adelanta el gobierno de Gustavo Petro.
Cualquier manejo imprudente de la relación con Venezuela podría desencadenar un aumento de la actividad criminal en la frontera. Por eso, mantener el diálogo es una cuestión de seguridad nacional", precisó.
Asimismo, reiteró la importancia de la colaboración entre ambas naciones en asuntos humanitarios, considerando que Colombia alberga cerca de tres millones de migrantes venezolanos y que una parte significativa de la población colombiana reside en territorio venezolano.
Nuestra política exterior debe responder a esta realidad. No podemos permitir que decisiones precipitadas afecten a quienes dependen de una relación estable entre los dos países", puntualizó.