Padres y familiares de presos políticos elevaron oraciones desde el Ministerio Público en Caracas

En Venezuela, las familias de los detenidos antes y después de las elecciones presidenciales siguen unidos realizando vigilas con las que puedan obtener resultados por parte de la Fiscalía.

Bajo la premisa de “Nuestros hijos no son terroristas”, padres de los jóvenes aprehendidos pidieron durante la noche de este lunes, al sistema judicial una revisión de expedientes para los más de 1.800 personas detenidas por las protestas postelectorales.

Las madres, que se reunieron frente a la sede del Ministerio Público en Caracas, repetían la misma exigencia: la libertad inmediata de sus hijos e hijas, detenidos tras las protestas postelectorales del 29 de julio.

La vigilia, cargada de denuncias sobre tratos crueles, inhumanos y degradantes, fue convocada por las Madres en Defensa de la Verdad, un grupo de mujeres que luchan juntas desde el 29 de julio por la libertad de sus familiares privados de libertad por motivos políticos.

El medio digital Efecto Cocuyo recogió una entrevista a Theany Urbina, madre de Miguel Urbina, un adolescente detenido en la ciudad de Caracas. “A mi hijo le pasaron corriente. Eso sí es terrorismo”, denunció la progenitora entre lágrimas.

Theany, como muchas otras, asegura que su hijo no participó en los disturbios postelectorales, pero señala que fue el adolescente fue arrestado en un operativo que califica como irregular, donde las autoridades buscaban cumplir cuotas de detenciones en barrios pobres de la ciudad.

En una situación similar estaría Cristian Pérez, cuya madre, Patricia Rivas, se trasladó en motocicleta desde Valencia a Caracas para pedir por su excarcelación.

“Los primeros tres días lo torturaron, le metieron electricidad, lo golpearon, lo batearon”, explicó Rivas.

Cristian, de 17 años, fue detenido cerca de su casa en el sector Prebo, de Valencia, lejos de cualquier manifestación, aseguró Rivas. “Dicen que lo arrestaron quemando un módulo, pero mi hijo estaba en la esquina de una plaza. Esto ha sido un holocausto para nosotros”, expresó con indignación.

Las madres coincidieron en que la tortura eléctrica ha sido un método recurrente para extraer confesiones y sembrar terror entre los jóvenes detenidos. “Nosotros vivimos en carne propia lo que es la tortura psicológica. Ellos, la física”, agregó Patricia, mientras sostenía un cartel con la fotografía de su hijo.

Este mismo lunes, el presidente Nicolás Maduro se refirió a las campañas de solicitud de liberación de los presos políticos. “No son ni presos políticos ni víctimas, son victimarios, violentos y terroristas”, apuntó el mandatario durante la transmisión de su programa Con Maduro+.

En relación a lo que calificó como un “intento de Golpe de Estado”, Maduro aseguró que “si el pueblo quiere paz, tiene que prepararse”. “La paz que hemos conquistado fue vulnerada el 29 y 30 de julio por comanditos fascistas”, opinó.

Acusó una vez más a la oposición de los 28 fallecidos reportados por el Ministerio Público, y afirmó que la coalición política creó “una narrativa con apoyo de las redes sociales”.

“Y mucha gente cómplice en el mundo que agarran su narrativa falsa para esconder la verdad. Tratando de convertir a los victimarios, a los que mataron, en víctimas, a los asesinos en presos políticos”, agregó el Presidente.

Reiteró que “el pueblo tiene que prepararse para tener unas navidades felices, un 2025 en armonía. ¡Violencia más nunca en ninguna calle! ¡Esa es la orden!”.